¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?

¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? Ironía

Los seres humanos se ven amenazados por sus propias creaciones (Ironía situacional)

Cuando Rick debe matar a Luba Luft y asiste a un ensayo en el Palacio de la ópera, piensa en lo bien que la diseñaron en la Asociación Rosen. Luba Luft es talentosa y en muchos sentidos es superior a cantantes de ópera humanas. En ese momento Rick piensa en que si los androides hubiesen permanecido inferiores a los humanos, no habría necesidad de matarlos. La ironía de esta situación es que son los humanos los que diseñan estos androides. Además, el avance de los androides tiene que ver con la demanda del mercado. Los humanos consumen androides, la industria perfecciona sus productos para atender a esa demanda. Sin embargo, el desarrollo de androides cada vez más sofisticados se convierten en una amenaza para la humanidad que ahora tiene que lidiar con ellos y destruirlos.

La misma sociedad que predica la empatía como valor supremo, discrimina a personas como Isidore por sus capacidades intelectuales disminuidas (Ironía situacional)

Precisamente porque la humanidad ha experimentado un hecho histórico devastador como la Guerra Mundial Terminus, la sociedad que quedó tras la catástrofe aprecia la auténtica vida y la empatía y los considera valores supremos. No obstante, vemos que algunos seres vivos son considerados inferiores y reciben un peor trato en la sociedad que el resto de los habitantes. John Isidore es quien mejor representa esta ironía. A pesar de tratarse de un ser humano, en una sociedad donde muchos murieron a consecuencia de la guerra y la radiactividad, John Isidore es clasificado como un ser "especial" y sus derechos y posibilidades son menores a las del resto. Asimismo, Isisdore es quien mejor encarna la empatía, ostenta con autenticidad la capacidad empática que la humanidad supuestamente tanto valora. Sin embargo, algunas de las actitudes que lo hacen empático son consideradas ridículas, por ejemplo, su capacidad por conmoverse con el sufrimiento de otro ser, aun cuando se trate de un ser eléctrico o artificial.

Por otra parte, en el mundo animal también existen escalas que contradicen los principios de esta sociedad que dice valorar la vida sobre todas las cosas. Cuando a Rick su vecino, Barbour, le sugiere comprarse un gato, Rick por poco no se ofende y le responde que él no quiere una mascota, sino un animal grande.

Las personas desarrollan tecnología para controlar sus emociones, pero terminan siendo esclavas de esas emociones que la tecnología les propone (Ironía situacional)

La novela abre con la discusión entre Rick y su esposa Iran. El motivo de su discusión tiene que ver con las emociones que ha programado para ese día en su climatizador, una máquina que controla los estados de ánimo. La ironía que aparece con esta máquina, que es común a otras formas de desarrollo tecnológico en la novela, es que los hombres han desarrollado tecnología para sentirse en control de cuestiones que naturalmente se les escapan, como por ejemplo, los sentimientos. Sin embargo, al desarrollar exitosamente la tecnología para modificar o controlar esos aspectos de la vida, se convierten esclavos de la tecnología. Tanto la culpa de Iran como el optimismo de Rick son artificiales y los llevan a vivir de una manera poco auténtica su vida aún cuando compraron el climatizador Penfield precisamente para estar en control de sus emociones.

Cuando conocemos a Pris Stratton como lectores sabemos que se trata de un androide, pero John Isidore no lo descubre todavía (Ironía dramática)

El capítulo en el que el narrador introduce al personaje de Pris Stratton está focalizado desde la perspectiva de John Isidore. Durante el capítulo 6 los lectores tienen una serie de indicios que le permiten sacar conclusiones sobre la verdadera identidad de Pris Stratton: no conoce al amigable Buster, no sigue a Mercer, no comprende que el cubo de margarina es una gesto de bienvenida, no tiene tacto al llamar a Isidore "cabeza hueca". Además, los lectores saben que hay seis Nexus-6 en la fuga a los que Rick Deckard debe encontrar y retirar. Finalmente, Pris Stratton se presenta a sí misma como Rachael Rosen y solo cuando ve que Isidore la relaciona con la Asociación Rosen, decide cambiar su nombre. Todo esto hace que sea relativamente fácil para el lector deducir que ella es un androide. Para Isidore, en cambio, esto no es claro. Él solo sabe que Pris se comporta de una manera extraña. En parte, esto se debe a que Isidore es un "cabeza hueca" cuyas capacidades intelectuales han sido afectadas por la radiactividad. Por otra parte, sabemos que para Isidore no importa demasiado si alguien es auténtico o falso porque él es capaz de sentir empatía por todo ser, los vivos y los "no vivos".