Don Quijote de la Mancha (Primera parte)

Don Quijote de la Mancha (Primera parte) Preguntas de Ensayo

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    ¿Qué transformación podemos ver en el personaje de Sancho Panza?

    Inicialmente, Sancho Panza desconoce los códigos de la caballería andante y posiblemente parte del vocabulario que don Quijote usa, como la palabra “ínsula”. Además su perspectiva realista contrasta con la del hidalgo. Sancho sabe que los molinos de viento no son gigantes, que los rebaños no son ejércitos enemigos, ni los que lo mantearon, fantasmas. Sin embargo, con el correr del tiempo, empieza a creer en algunos elementos ficcionales del mundo imaginario de su amo. Por ejemplo, cree que Dorotea es la princesa Micomicona, y también cree que don Quijote puede defenderla de un gigante enemigo suyo. Más aún, cuando el hidalgo, sonámbulo, corta los cueros de vino del ventero, creyendo que lucha con el gigante, Sancho realmente cree ver la cabeza decapitada del ser fabuloso y su sangre (el vino). Esto conduce a pensar en un comienzo de “quijotización” del personaje. Hacia el final Sancho gana gran parte de la elocuencia de su maestro y la usa en su beneficio cuando discute con el barbero sobre su derecho a quedarse con los despojos de una guerra justa: “en buena guerra ganó mi señor don Quijote estos despojos” (p. 334). Aunque más de una vez siente miedo y hasta ha llegado a querer abandonar a su amo, maldiciendo la hora en que salió de su aldea (cap. 18), al final, Sancho siente que no hay mejor tarea en el mundo que la de ser escudero de un caballero andante y salir a los caminos a buscar aventuras.

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    Compare a don Quijote con Anselmo, el personaje de la novela intercalada del Curioso impertinente.

    Ambos personajes son idealistas. Don Quijote quiere resucitar la caballería andante y busca imitar en todas sus acciones los comportamientos de los personajes de sus libros de ficción. Eso le impide ver la realidad de su entorno y adecuarse a sus circunstancias. Anselmo busca un ideal de perfección en su esposa, y se propone obstinadamente llevar a cabo un plan para poner a prueba su honradez. Su deseo le impide escuchar las numerosas advertencias de su amigo para convencerlo de que desista de su propósito. En uno y otro caso, las acciones de estos personajes chocan con el comportamiento social aceptado, pero mientras que en el caso de Don Quijote las consecuencias son cómicas (nunca el tono deja de ser cómico, aunque su comportamiento lo lleve a luchar con otras personas), en el caso de Anselmo, son trágicas, puesto que sus acciones conducen a un desenlace fatal para él, para su amigo y para su esposa.

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    Discuta las semejanzas y diferencias en la recepción de los libros de caballerías en los siguientes personajes: Don Quijote, Juan Palomeque el Zurdo, el cura y el canónigo toledano.

    Don Quijote y Juan Palomeque el Zurdo creen que las historias de los libros de caballerías realmente sucedieron. Incluso ambos defienden esta postura con el mismo argumento, diciendo que han sido publicados con la licencia de los reyes. El ventero, más de una vez, al escuchar estas historias (él no las lee porque es analfabeto), ha sentido ganas de luchar como los caballeros, pero afirma que no lo hará puesto que sabe que la caballería andante ha quedado en el pasado. Don Quijote lleva el mismo deseo más lejos y, en efecto, sale a los caminos en busca de aventuras, armado como un caballero medieval e imitando en todas sus acciones a las de los personajes de sus libros.

    El cura y el canónigo saben que las historias que narran los libros de caballerías no son hechos reales. El cura afirma que el Consejo Real las autoriza porque sirven como entretenimiento, y no por considerarlas verídicas. El cura ha decidido quemar casi todos los libros de la biblioteca del hidalgo, porque cree que los libros de caballerías resultan perjudiciales para su amigo, e insinúa que haría lo mismo con los libros del ventero. Asimismo, el canónigo dice que arrojaría los libros de caballerías al fuego “por ser falsos y embusteros” y por dar “ocasión que el vulgo ignorante venga a creer y a tener por verdaderas tantas necedades como contienen” (p. 362). Además, ambos personajes comparan a estos libros con herejes.

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    Discuta sobre el concepto de amor caballeresco que se presenta en la novela.

    Don Quijote sabe que uno de los requisitos esenciales para ser un caballero andante es el de amar a una dama, encomendarse a ella en cada aventura y dedicarle cada una de sus hazañas. La relación del caballero con la dama en la literatura caballeresca guardaba una estrecha relación con idea de vasallaje feudal. La dama ocupaba en ella el lugar del señor, y el caballero, el de un vasallo. Así, don Quijote, siguiendo este código, dice acerca de Dulcinea “yo la sirvo” (p. 86) y “es reina y señora mía” (p. 87). La exaltación e idealización de la dama es otra de las características del amor caballeresco. Don quijote exalta en muchas ocasiones la belleza y las cualidades de Dulcinea. Sin embargo, también sabe, como demuestra en el capítulo 25, que esa forma de idealizarla corresponde a una convención literaria.

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    ¿Por qué Don Quijote puede ser vista como una novela polifónica?

    En Don Quijote se muestran a menudo los puntos de vista enfrentados de los diferentes personajes, por ejemplo, los del hidalgo y su escudero. Lo podemos ver cuando don Quijote afirma ver gigantes en donde Sancho Panza sostiene que hay molinos de viento (capítulo 8), o cuando el hidalgo escucha sonidos de instrumentos militares en lugar de los balidos que oye su escudero (capítulo 18). Lo mismo ocurre con la naturaleza del objeto que don Quijote le quita al barbero (bacía o yelmo de Mambrino), que suscita una extensa discusión entre ambos.

    Además, la novela muestra las diferentes formas de hablar de las personas, por ejemplo, a partir de la confusión del hidalgo con la palabra “truchuela”: “un pescado que en Castilla llaman abadejo, y en Andalucía bacallao, y en otras partes curadillo, y en otras truchuela” (p. 34). También en la novela se hacen explícitos los diferentes sentidos que adopta una palabra, según quien la emplee. Por ejemplo, la palabra “cantar”, que para el hidalgo significaría algo como “producir un canto”, es usada por un galeote para referirse a que alguien “confesó” un delito (capítulo 22).