El niño africano

El niño africano Elementos Literarios

Genero

Novela autobiográfica.

Configuración y Contexto

Guinea Francesa (actual República de Guinea), décadas de 1930 y 1940.

Narrador y Punto de Vista

El protagonista y narrador en primera persona es Laye, figura que coincide con el autor, dado que se trata de una autobiografía.

Tono y Estado de Ánimo

Reflexivo, curioso, nostálgico y explicativo.

Protagonista y Antagonista

El protagonista es Laye. No hay un antagonista central en la obra, pero, en los episodios escolares en Kouroussa, es posible considerar a los niños del último año como antagonistas.

Conflicto Principal

El protagonista se siente inseguro sobre su futuro y se da cuenta de que su destino no es ser herrero, como su padre, ni agricultor, como sus tíos maternos. Así, debe ir lidiando con la angustia de estar destinado al exilio, a abandonar la comunidad y formarse a la manera occidental.

Climax

El clímax de la novela se relata en el capítulo 8, dedicado a la circuncisión del protagonista, ya que esta ceremonia significa su pasaje a la adultez: a partir de este momento, Laye ya no es más un niño, sino un hombre.

Presagio

En los primeros capítulos de la novela, el padre le dice a Laye que su destino será seguir un camino diferente y dejar la comunidad. Este presagio se vuelve cierto a medida que el chico crece, pasa a estudiar en Conakry, primero, y obtiene una beca para formarse en Francia, después.

Atenuación

Al leer la escena relatada en la primera página de la novela, que presenta a Laye jugando con una serpiente y una caña, podemos pensar que no es más que una simple anécdota. Sin embargo, esta funciona como disparador para explicar la presencia de la serpiente negra en las vidas del protagonista y sus familiares, y abrir la novela hacia su dimensión mágica, espiritual y sobrenatural.

Alusiones

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Imágenes

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Paradoja

Laye se dispone a tomar un tren para viajar hacia Conakry y realizar los estudios secundarios en la capital. En esa oportunidad, sus hermanos y amigos lo acompañan hasta la estación. Entonces, el protagonista se siente como cuando todos caminaban juntos hacia la escuela en Kouroussa. Sin embargo, esta vez debe despedirse, y eso lo angustia y lo hace sentirse desconectado de los demás chicos. Por eso, afirma que, paradójicamente, "Nunca habíamos sido más numerosos, y nunca me había sentido tan solo" (130).

Paralelismo

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Metonimia y Sinecdoque

Cuando Laye explica los trabajos de la siega de arroz en Tindican, usa la sinécdoque para referirse a los hombres agricultores como "negros pechos desnudos" (47) y "pechos negros" (51), destacando que los campesinos están con el torso descubierto y que tienen la piel oscura.

Personificación

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