El Gran Gatsby

El Gran Gatsby Resumen y Análisis Capítulo 7

Resumen

Cuando la curiosidad sobre la verdadera identidad de Gatsby está en su pico, el protagonista deja de celebrar las fiestas. Nick se acerca a la mansión, pero el mayordomo no lo deja entrar. Solo le dice que Gatsby no está enfermo. La mujer finlandesa que trabaja en la casa de Nick le informa que Gatsby ha despedido a todos los empleados de su casa y los ha reemplazado por nuevos. Gatsby llama por teléfono a Nick y le cuenta que Daisy lo visita por las tardes y que quiere evitar los rumores. Luego lo invita a almorzar a la casa de Daisy.

En el día más caluroso del verano, Nick va a la casa de Daisy, donde se encuentra con Gatsby, Tom y Jordan para almorzar. Daisy besa en la boca a Gatsby cuando Tom sale de la habitación. La niñera llega con la hija de Daisy y Gatsby queda sorprendido viendo a la niña.

Tom se da cuenta de que hay una relación romántica entre Daisy y Gatsby por la manera en la que se miran. Luego, Gatsby le dice a Nick que Daisy es indiscreta y que su voz “está llena de dinero” (2011:159). Nick reflexiona sobre esto: “Estaba llena de dinero: ése era el encanto inagotable que subía y bajaba en ella” (2011:159). A continuación, Daisy pregunta si quieren ir a la ciudad, y Tom dice que sí, pero luego comenta: “no veo para qué ir a la ciudad (...) a las mujeres se les mete cada idea en la cabeza” (2011:159).

Se preparan para ir. Tom agarra una botella de alcohol y la envuelve en una toalla. Gatsby sugiere que todos vayan a la ciudad en su auto, pero Tom le pide que lo deje probarlo y le ofrece manejar su cupé. La sugerencia no le gusta a Daisy. Tom la presiona hacia el auto de Gatsby pero ella contesta: “tú lleva a Nick y a Jordan. Nosotros los seguimos en la cupé” (2011:160). En el auto con Jordan y Nick, Tom está furioso y cuenta que ha hecho una investigación sobre Gatsby. Se aproximan al valle de cenizas y ven los ojos del cartel del doctor T. J. Eckleburg. Frenan en el garage de Wilson para cargar nafta y ven pasar la cupé que maneja Gatsby con Daisy hacia la ciudad. Wilson le cuenta a Tom que va a mudarse al Oeste porque su mujer estaba teniendo una relación extramatrimonial. Saliendo del garage, Myrtle los mira desde la ventana con una expresión de “celoso terror” (2011:164), ya que piensa que Jordan es la mujer de Tom. Tom se siente muy nervioso porque tanto su esposa como su amante están dejándolo.

Para escapar del calor de la ciudad, el grupo contrata una suite en el hotel Plaza. La habitación es amplia y sofocante aunque son las cuatro de la tarde. Cuando Tom le pide a Daisy que deje de rezongar por el calor, Gatsby la defiende: “¿Por qué no la deja tranquila, camarada?” (2011:166). Tom se molesta porque Gatsby lo llame “camarada” y Daisy intenta calmarlo. Jordan cambia de tema: habla del calor y menciona la boda que está sucediendo en el hotel. Escuchan la marcha nupcial que llega desde el salón de abajo. Daisy recuerda su propia boda en Louisville. Tom le hace muchas preguntas a Gatsby sobre su paso por Oxford y lo acusa de estar mintiendo. Gatsby dice que estuvo en Oxford en 1919, solo cinco meses: “fue una oportunidad que nos dieron a algunos oficiales después del armisticio” (2011:169). Nick observa que Gatsby está muy confiado. Tom le pregunta a Gatsby: “¿(...) qué clase de jaleo está tratando de armar usted en mi casa al fin y al cabo?” (2011:169). Cuando Daisy le pide a Tom que se controle, él estalla y llama a Gatsby “el Sr. Don Nadie de Ninguna Parte” (2011:170). Expone la aventura que su mujer tiene con él y la relaciona con el fin de la civilización. Luego, Daisy le pide a Tom que vuelvan a su casa pero él la ignora. Nick también sugiere volver a Long Island.

Gatsby le dice a Tom: “su esposa no lo ama (...) Nunca lo amó. Me ama a mí.” (2011:170). Luego, sigue: “solo se casó con usted porque yo era pobre y estaba cansada de esperarme” (2011:171). Tom le hace preguntas a Daisy en tono paternal, pero Gatsby contesta por ella. Le dice que se aman hace cinco años. Tom contesta que Daisy lo ama a él y que su problema es que “a veces se le meten ideas tontas en la cabeza y no sabe lo que hace” (2011:172). Daisy le contesta: “Eres repugnante” (2011:172), y le pregunta a Nick si sabe por qué se fueron de Chicago, sugiriendo que Tom tenía una aventura amorosa. Gatsby se acerca a Daisy y le pide que le diga a Tom que nunca lo ha amado. Daisy mira a Nick y a Jordan como si no se hubiese dado cuenta de lo que estaba haciendo, como si “nunca, en ningún momento, hubiera tenido intención de hacer nada” (2011:172). Sin embargo, dice que nunca lo ha amado.

Daisy intenta prender un cigarrillo pero le tiembla la mano. Le dice a Gatsby que le está pidiendo mucho, que lo ama a él pero que también ha amado a Tom. Gatsby la mira, sorprendido. Luego, Daisy admite que ama a los dos y Gatsby quiere hablar a solas con ella, pero Tom no los deja. Promete que la cuidará mejor desde ese día, pero Gatsby le dice que Daisy lo está dejando. Tom lo niega: “menos por un vulgar estafador que tendría que robar el anillo que le pusiera en el dedo” (2011:174). Daisy quiere irse del hotel pero Tom vuelve a preguntarle a Gatsby quién es, y le confiesa que lo ha investigado. Gatsby insiste con que su esposa no lo ama y Tom lo ataca diciendo que en sus farmacias vende alcohol de cereal ilegalmente. Gatsby se defiende comparando ese trabajo con el del banquero Walter Chase. Tom se enoja porque Gatsby lo llama “camarada” constantemente. En ese momento, Gatsby empieza a hablarle a Daisy, defendiéndose contra las acusaciones de Tom. Ella se retrae sobre sí misma y le pide a Tom volver a la casa. Este le dice que vuelva con Gatsby en el auto y aclara: “creo que se da cuenta de que su pequeño coqueteo presuntuoso se acabó” (2011:176).

Gatsby y Daisy salen de la habitación y, en ese momento, Nick recuerda que es su cumpleaños. A las siete de la tarde emprende el retorno hacia Long Island con Tom y Jordan. En el valle de las cenizas, ven una multitud parada en la carretera. Se acercan y descubren que Myrtle está muerta porque un auto la atropelló. Hay un joven llamado Michaelis, que es el principal testigo del caso. Estaba en el garage de Wilson en los momentos previos al accidente. Wilson le contó que tenía a su mujer encerrada en la casa y Michaelis vio a Myrtle salir corriendo hacia la ruta, mover las manos, gritar y ser atropellada por el auto. Los periódicos lo llaman “el auto de la muerte” (2011:178) porque no se detuvo luego de atropellarla. Tom, Jordan y Nick ven el cuerpo de Myrtle envuelto en una manta en la mesa de trabajo del taller. Michaelis dice que el coche venía desde Nueva York y era amarillo, grande y nuevo. Tom se da cuenta de que es el auto de Gatsby.

Siguen el viaje hacia East Egg y Nick ve lágrimas en la cara de Tom. Llegan a la casa de los Buchanan y Tom se alegra porque Daisy está en la casa. Jordan entra pero Nick se queda esperando un taxi afuera. Se siente asqueado y quiere estar solo. En ese momento encuentra a Gatsby entre los arbustos del sendero. Este le pregunta si la chica está muerta, y Nick le dice que sí. Gatsby le informa que Daisy manejaba el auto: “cuando salimos de Nueva York, ella estaba muy nerviosa y pensó que manejar la estabilizaría” (2011:185). Le cuenta que la chica se acercó al auto como si los conociera, como si les quisiera decir algo. Le dice que va a esperar a que Daisy se vaya a dormir para asegurarse de que Tom no la lastime. Nick se acerca a la casa para confirmar que no haya signos de conmoción y ve al matrimonio Buchanan por la rendija del alféizar, sentados, dándose la mano. Le dice a Gatsby que todo está tranquilo y se va a su casa. Gatsby se queda en el sendero bajo la luz de la luna.

Análisis

El séptimo capítulo contiene el clímax de la historia: la confrontación entre Gatsby y Tom por el amor de Daisy que resulta en que el sueño de Gatsby y su concepción sobre sí mismo comiencen a quebrarse. Además, incluye la muerte de Myrtle Wilson en manos de Daisy cuando ella maneja el auto de Gatsby, el fallido abandono de Daisy a Tom y el final de la relación entre Nick y Jordan.

En la estadía en la suite del Hotel Plaza se tensiona al máximo el triángulo amoroso entre Tom, Daisy y Gatsby. Es interesante cómo la estrategia que utiliza Tom para desacreditar a su oponente es hacer un chequeo de su pasado. Cuestiona el origen de la riqueza de Gatsby porque sabe que es lo que más le importa a Daisy. Cuando ella conoce el falso origen aristocrático de Gatsby, se arrepiente de su affaire. Una vez más, aparece el menosprecio que tiene la aristocracia frente a los "nuevos ricos" que salen de familias humildes.

Anteriormente, en la casa de los Buchanan en East Egg, Gatsby dice que en la voz de Daisy se nota su riqueza. Significativamente, Gatsby encuentra los rastros del dinero en la voz de su enamorada, que es un canal que define la presencia y la individualidad de las personas. Gatsby dice que Daisy es indiscreta porque está llena de dinero. Sobre esto, Nick reflexiona: “Estaba llena de dinero: ése era el encanto inagotable que subía y bajaba en ella” (2011:159). De esta manera, Nick justifica que Daisy invite a su amante a comer con su marido y exponga su affaire. Nick descubre, en ese momento, cómo la sensualidad y el atractivo de Daisy se basan en su dinero, y cómo ella tiene cierta impunidad porque su riqueza la protege de las consecuencias de sus acciones. Como entiende Bloom, es importante que esta revelación del vínculo simbólico entre Daisy y el dinero sea detectado por Gatsby, porque reconoce que Daisy representa la riqueza y la elegancia que él añora (2006).

La aparición de la hija de Daisy pone en tensión la negación que tiene Gatsby de aceptar que Daisy y Tom efectivamente tienen un vínculo afectivo. Esta niña es la prueba de que el tiempo ha pasado y de que el deseo de Gatsby de recuperar el pasado es imposible. Por su parte, Daisy no parece cuidar demasiado de la niña, a quien deja con su niñera y con la que no se muestra involucrada.

En la suite del Hotel Plaza, Tom parece dar cuenta de la persona “ficticia” de Gatsby cuando le pregunta: “Todo ese asunto de ‘camarda’. ¿De dónde lo sacó?” (20111:167). De alguna manera, comprende que hay una construcción del personaje o una puesta en escena en Gatsby. Sabe que su mujer no dejaría a su esposo aristócrata por un hombre más humilde, más allá del amor que sienta, y por eso desprestigia a Gatsby. Y luego de que Daisy descubre el trasfondo ilegal y el origen humilde de Gatsby, se da de hecho cierto desencanto en ella que rompe el sueño romántico de Gatsby. La idea que Daisy tiene sobre Gatsby es fundamental para la construcción del protagonista, y cuando esta imagen deja de ser perfecta, como Gatsby desea, el personaje se quiebra; su propia idea de sí mismo se ve afectada.

Nick utiliza metáforas para describir este quiebre en el sueño de Gatsby y en su personalidad: “sólo el sueño muerto continuó la pelea, mientras la tarde se escurría, tratando de tocar lo que ya no era tangible” (2011:175). La idea de lo inmaterial o incorpóreo alude a la construcción fantasiosa de la identidad de Gatsby, que se pone en jaque luego de que Daisy deja de confiar en él. Respecto de la importancia de la mirada de Daisy, en el comienzo del capítulo Nick comenta sobre la relevancia que Gatsby comienza a darle a los chismes sobre él. Quiere, por primera vez, cuidar la opinión pública sobre sí mismo para preservar la imagen que Daisy tiene sobre él. Por ese motivo, deja de celebrar fiestas y cambia al personal de su mansión.

El tema de la clase es fundamental en el duelo entre Tom y Gatsby. Más allá de la vergüenza que le genera a Tom la infidelidad de su mujer, el problema mayor es que lo hace con un hombre de una clase social inferior. Este hecho representa una deshonra para un hombre blanco y rico como Tom. Sin embargo, y haciendo uso de sus privilegios de género, su aventura con una mujer de una clase social más baja (Myrtle) no es leída por Tom con la misma gravedad que la de su mujer.

Respecto del accidente de Myrtle, es considerable cómo se cuenta el hecho. Nick deja de narrar como un reportero basado en su experiencia y comienza una narración más expositiva. Cuenta el hecho desde una distancia mayor y genera intriga en los lectores, ya que menciona una investigación y un accidente, sin explicitar de qué accidente habla. Luego incluye la versión de Michaelis, el testigo, que cuenta una historia de violencia de género entre George Wilson y Myrtle. La descripción del hecho se comprime: “Un momento después ella salió corriendo al anochecer, agitando las manos y gritando; antes de que él pudiera moverse de su puerta, el asunto había terminado” (2011:178).

El capítulo termina con Tom y Daisy afianzando su lealtad mutua. Una vez más, la clase prevalece sobre el amor. Simultáneamente, Gatsby espera afuera de la mansión de los Buchanan dispuesto a sacrificarse por amor. El contrapunto entre Gatsby y Daisy es muy claro: Gatsby prioriza el amor y Daisy, el estatus social. Ella no se responsabiliza por el crimen que comete y Gatsby está dispuesto a asumir la responsabilidad del asesinato de su amada. Sobre esto, Nick comenta que Gatsby “hablaba como si la reacción de Daisy fuera la único que importase” (2011:185).