Cuentos
"El caso de la señorita Amelia" narra la historia del Doctor Z, un erudito que pasa sus años buscando la sabiduría por todo el mundo y, al regresar a Buenos Aires, descubre que Amelia, la niña a quien le profesaba su amor, no ha crecido.
"Cuento de Pascua" cuenta la experiencia del narrador tras probar una droga alucinógena que le ofrece un caballero alemán en una fiesta. El narrador pasea de noche por París y presencia la decapitación de María Antonieta en la Plaza de la Concordia. Luego, mientras camina por las Tullerías, descubre las cabezas de un sinfín de personajes decapitados que componen la historia de la cultura occidental.
"La extraña muerte de Fray Pedro" relata la historia de un fraile que está obsesionado por los descubrimientos científicos de su época e intenta utilizarlos para revelar los misterios de la religión. Tras realizar una radiografía de una hostia consagrada, Fray Pedro muere en condiciones misteriosas. Luego, quienes encuentran la radiografía descubren en ella la imagen de Cristo crucificado.
Crónicas
En "Bajo las luces del sol naciente", el cronista idealiza Japón, sus tradiciones, su cultura y sus religiones. Luego, critica la civilización occidental y la modernidad que han invadido Japón y lo han corrompido.
En "Mi domingo de Ramos", el cronista narra una ensoñación: su alma se desprende de su cuerpo y se dirige a Jerusalén para presenciar la entrada triunfal de Cristo. Luego, recuerda un Domingo de Ramos de su infancia, se encuentra con el niño que fue y observa cómo una figura angelical le augura una vida dedicada a concebir grandes obras pero, al mismo tiempo, a experimentar mucho sufrimiento.
"Hombres y pájaros" es una crónica dedicada a París. El narrador se concentra en las personas que en las plazas les dan de comer a los pájaros, y a la inocencia de esta acción contrapone una serie de imágenes negativas de la modernidad parisina: los excesos de todo tipo que conforman la nueva condición de vida citadina, y los vagabundos y los criminales que abundan en las calles.
"Primavera apolínea" es una crónica autobiográfica en la que Rubén Darío habla de su juventud. En ella destaca el interés que sintió desde adolescente por la justicia social y cómo luego se enamoró del arte y decidió dedicar su vida a la literatura.
"Visiones pasadas" está compuesta por tres crónicas breves dedicadas a escenarios de color provinciano. La primera describe los cambios que experimenta una ciudad portuaria al llegar la marea alta. En la siguiente, el cronista se dirige a una dama para explicarle cómo se baila el pasillo, una danza típica de Colombia, y la tercera está dedicada a la imagen de la Virgen Negra, que protege a los campesinos y marinos de Normandía.
En "Los miserables", el cronista describe tres tipos sociales producto de la modernidad: el gueux francés, el tramp estadounidense y el atorrante argentino. A través de estos personajes, Rubén Darío realiza una crítica de la modernidad y del sistema capitalista.
"París nocturno" es una crónica dedicada a la noche parisina. En un comienzo, el narrador destaca los aspectos positivos de la ciudad: su cosmopolitismo y el sinfín de atracciones que presenta a sus habitantes. De allí, el relato se mueve a los aspectos negativos de la noche parisina y critica la modernidad como una época en la que se rinde culto a los placeres más bajos, y en la que se exaltan los aspectos más ruines de la condición humana.
"Poemas de arte" reúne una serie de poemas en prosa que describen diversas obras del pintor alemán Böcklin, por quien Rubén Darío sentía una particular fascinación.
"Curiosidades literarias" presenta un ejercicio o juego literario: durante una tertulia, el narrador les cuenta a sus amigos que, cuando dirigía una revista literaria en Nicaragua, hizo insertar un texto de autor anónimo en el que la única vocal que se utilizaba era la "a". Dicho texto se incluye en la crónica: se trata de la trágica historia de amor de Ana y Blas.
