La naranja mecánica

La naranja mecánica Elementos Literarios

Genero

Novela de aprendizaje, novela distópica.

Configuración y Contexto

Una ciudad en un futuro no muy lejano.

Narrador y Punto de Vista

El narrador es Alex. Narra los hechos desde su punto de vista, en primera persona.

Tono y Estado de Ánimo

El tono oscila entre dramático y cómico.

Protagonista y Antagonista

El protagonista es Alex. El antagonista es el Gobierno y los agentes que trabajan para él, de los cuales el Ministro del Interior es el más representativo.

Conflicto Principal

El gobierno ha tomado medidas extremas de seguridad y control de los ciudadanos. El Ministro del Interior decide poner a prueba, con Alex, la técnica de Ludovico, con el propósito de eliminar su conducta criminal. Pero la técnica elimina también su libre albedrío, lo cual implica ser reducido a una "naranja mecánica", o un mecanismo con respuestas condicionadas.

Climax

El clímax se produce en la culminación del tratamiento con la técnica de Ludovico, cuando Alex pierde su libre albedrío y literalmente no puede pensar ni en "matar una mosca" (73).

Presagio

"-Y -dijo mi papá- estabas como impotente en un charco de sangre y no podías contestar los golpes. -Eso era realmente lo contrario de lo que ocurría, de modo que otra vez sonreí discretamente para mis adentros" (33)

El padre de Alex tiene un sueño premonitorio. Sueña que su hijo es golpeado y no tiene capacidad de reacción. Eso es lo que ocurre exactamente cuando Alex termina su tratamiento con la técnica de Ludovico. Los doctores preparan una presentación para demostrar ante una audiencia los resultados que obtuvieron. Alex se paraliza ante cada golpe y no tiene capacidad de respuesta (Segunda parte, capítulo 7).

Atenuación

"-Toma, papá, no es gran cosa -le dije-. Es lo que gané anoche. Pero tal vez les alcance para una piteada de whisky que se pueden tomar los dos por ahí." (33)

"No es gran cosa" es una atenuación o lítote: afirma algo negando su contrario. Lo que realmente dice es: "es poca cosa". La frase atenúa o disminuye su verdadero significado, que en este caso es que el dinero que Alex le da al padre es poco.

Alusiones

"El hombre destruye lo que ama, como dijo el poeta-prisionero." (p. 66)

El doctor Branom alude a Oscar Wilde. La cita es de la “Balada de la cárcel de Reading” que el poeta escribió en la cárcel. Alex también es privado de su libertad en ese momento y los doctores prueban con él la técnica de Ludovico. Al darse cuenta de que Alex ama la música clásica, los doctores quieren incorporarla al tratamiento como un castigo, puesto que así quedará asociada a la violencia y él ya no podrá disfrutarla. De esta manera, Alex, mediante el tratamiento, destruirá lo que ama.

Imágenes

Ver en esta guía la sección "Imágenes".

Paradoja

Los doctores que pretenden curar a Alex de su tendencia hacia la violencia sienten tanto placer por la violencia como él. Podemos ver que disfrutan del sufrimiento de Alex cuando experimentan con él la técnica de Ludovico. Por ejemplo, en una oportunidad, Alex escucha una risa (o "smecada") en la oscuridad luego de que les pide a los médicos que lo dejen vomitar: "-Quiero vomitar. Por favor, déjenme vomitar. Por favor, tráiganme algo para vomitar. -Pero este doctor Brodsky replicó: -Pura imaginación. No tiene por qué preocuparse. Ya viene otra película. -Tal vez quiso hacer una broma, porque oí como una smecada en la oscuridad" (66).

Paralelismo

N/A

Metonimia y Sinecdoque

"-¿Nuevo estilo? -repetí-. ¿Qué es eso de nuevo estilo? Seguro que se habló mucho a mis durmientes espaldas. Déjenme slusar un poco más." (33)

"Durmientes espaldas" es una metonimia, pues quien dormía era Alex, mientras sus amigos "conspiraban" en su contra. La metonimia une la idea de que él dormía y la de que sus amigos "hablaban a espaldas suya", una locución que significa que "hablaban mal de él".

Personificación

"(...) Procuraba pasar sobre la vieja ptitsa en el suelo para alcanzar al hermoso Ludwig van que me miraba con enojo de piedra." (39 - 40)

Se trata de la personificación de un busto de piedra de Ludwing van Beethoven, que "mira con enojo" a Alex como si fuera humano, mientras él intenta robarlo de la casa de la anciana.