Manifiesto del Partido Comunista

Manifiesto del Partido Comunista Las influencias de Hegel en Marx

Una de las bases del Manifiesto del Partido Comunista es la idea del progreso. Karl Marx heredó del filósofo Hegel esta concepción de la historia. Al igual que Hegel, Marx creía que la historia humana se desarrolla según una serie de etapas históricas distintas, cada una de las cuales sigue necesariamente a la otra. Estas etapas conducen en última instancia a un punto final utópico prescrito, después del cual no habrá más cambios. Se trata de un fin de la historia. Sin embargo, a diferencia de Hegel, Marx pensaba que estas etapas pueden predecirse. Esto se debe a que existen leyes que rigen el progreso de la historia. En un universo así, los hombres no son más que agentes que facilitan o frustran el nacimiento de un nuevo periodo histórico, sin poder alterar la naturaleza del resultado final. Marx creía haber descubierto esas leyes y así predice la desaparición del capitalismo y el triunfo del comunismo.

Otra de las herramientas que Karl Marx adapta de Hegel es la dialéctica como la forma en la que se da este progreso histórico. Según el relato dialéctico de la historia de Marx, que adapta de Hegel, toda clase es inestable, destinada a la destrucción final debido a sus contradicciones internas. De sus cenizas surge una nueva clase que resuelve las contradicciones de su predecesora, pero que conserva las suyas propias, lo que provocará su eventual desaparición. En términos más concretos, la burguesía debe crear al proletariado como condición de su propio desarrollo, es decir, para trabajar en sus industrias. Para minimizar el coste y maximizar la ganancia, debe tratar al proletariado cada vez peor, pero, al mismo tiempo, le proporciona los medios para asociarse a través de la política. La consecuencia necesaria de esto es que el proletariado gana poder y derroca a sus opresores. La contradicción interna es la necesidad burguesa del trabajo del proletariado, una necesidad que, cuando se satisface, crea las condiciones de la erradicación de la burguesía.

A partir de las relecturas de Hegel, Marx puede plantear su concepción materialista del mundo. Esta palabra remite a que, para el autor, las transformaciones de la realidad se deben a las condiciones materiales características de cada etapa. Esta mirada tiene como novedosa la idea de que todo cambio social se deriva de las relaciones económicas de ese momento. Esta perspectiva, que sigue siendo debatida hasta nuestros días, permite pensar que la cronología histórica viene determinada por la actividad económica de la sociedad.