Manifiesto del Partido Comunista

Manifiesto del Partido Comunista Ironía

“Un espectro se cierne sobre Europa: el espectro del comunismo” (p.40) (Ironía verbal)

En esta frase, los autores utilizan la metáfora del espectro con un sentido irónico. Si la figura del fantasma se vincula con lo terrorífico y amenazante, el objetivo del Manifiesto es precisamente lo contrario: dar a entender que, para el proletariado, el comunismo poco tiene que ver con estos significados ocultos o tenebrosos. Por el contrario, Marx y Engels buscan dejar en claro las ideas y tendencias de este movimiento político de manera clara y determinada, para poder convocar al proletariado internacional a luchar por su revolución.

“¡La propiedad bien adquirida, fruto del trabajo y del esfuerzo humano! ¿Os referís acaso, a la propiedad del humilde artesano, del pequeño labriego, precedente histórico de la propiedad burguesa?” (p.63) (Ironía verbal)

Marx y Engels ironizan sobre el significado real de la propiedad privada para la sociedad capitalista. Mientras que la burguesía le critica al comunismo la demolición de la propiedad privada, los autores dejan en claro que, para algunos sectores, este privilegio es inexistente. En el caso del labriego y el artesano, el mismo desarrollo de la burguesía se encargó de destruir su propiedad privada.

“¡Abolición de la familia! Al hablar de estas condiciones satánicas de los comunistas, hasta los más radicales gritan escándalo” (p.67) (Ironía verbal)

En esta frase, los autores describen como “satánica” la premisa de la abolición de la familia defendida por los comunistas. Esta descripción es irónica, ya que los autores sostienen que lo verdaderamente nocivo para el ser humano es la familia característica del sistema capitalista. En realidad, Marx y Engels apuntan a la demolición de la familia burguesa como una unidad basada en el lucro y la ganancia de dinero.

“Para colocar al pueblo de su lado, estos aristócratas enarbolaban como bandera el saco de mendigo del proletariado” (p.77) (Ironía verbal)

En esta cita, los autores ironizan sobre el uso provechoso que hacen los sectores dominantes de las consignas y reivindicaciones del proletariado. Según Marx y Engels, esta aristocracia convoca a la clase obrera para luego exhibir las mismas herramientas de dominación que sostuvieron durante siglos de opresión.