La Celestina

La Celestina Elementos Literarios

Genero

Novela dialogada

Configuración y Contexto

España, Edad Media

Narrador y Punto de Vista

Uno de los rasgos singulares de la obra es la ausencia de un narrador único. La narración de los hechos se reparte entre las voces de todos los personajes. Así, conocemos múltiples puntos de vista en el transcurso de la tragicomedia.

Tono y Estado de Ánimo

El tono es tragicómico: combina comicidad, humor y burlas con escenas de sufrimiento y un desenlace trágico.

Protagonista y Antagonista

A lo largo de la obra se producen varios antagonismos, pero de modo general podemos pensar que Celestina es antagonista de Calisto y Melibea porque no muestra sus verdaderas intenciones. Aunque los amantes piensen que la alcahueta los ayuda, ella solo busca una recompensa económica y los engaña sistemáticamente. Ese engaño los lleva a la muerte a los tres.

Conflicto Principal

Calisto está enamorado de Melibea, pero es un seductor torpe y no puede enamorarla. Para eso, contrata los servicios de Celestina, una alcahueta que engaña a la muchacha para que ame a Calisto.

Climax

El clímax de la tragicomedia se produce cuando Celestina se niega a dividir los pagos de Calisto con Sempronio y Pármeno. Enojados, ellos la matan. Esto desencadena directamente la muerte de los criados, más tarde la de Calisto y, por último, el suicidio de Melibea.

Presagio

Esta tragicomedia ofrece una larga lista de indicios y presagios en las voces de diferentes personajes. En las páginas iniciales, durante su primera conversación con Calisto, Melibea afirma que "la paga será tan fiera cual la merece tu loco atrevimiento" (Auto I, p. 54). Sempronio, por su parte, le habla de las "caídas" (Auto I, p. 62) que han sufrido otros hombres enamorados por entregarse a las mujeres. Mientras tanto, Pármeno le pregunta: "¿Por qué, señor, te matas?" (Auto I, p. 73), al darse cuenta de que caerá en la trampa de Celestina, y luego asegura: "el amor parió tu pena; la pena causará perder tu cuerpo y el alma y hacienda" (Auto II, p. 96). El propio Calisto canta: "En gran peligro me veo; / En mi muerte no hay tardanza, / Pues que me pide el deseo / Lo que me niega la esperanza" (Auto VIII, p 178). Alisa, por otro lado, anticipa la pérdida de la virginidad de su hija cuando comenta que la gente como Celestina suele "mudar los propósitos castos" de las personas nobles (Auto X, p. 207). En definitiva, prácticamente todos los personajes enuncian indicios del final trágico.

Atenuación

Las once estrofas incluidas en los textos preliminares pueden parecer insignificantes en una primera instancia, pero brindan una gran clave para conocer datos sobre la autoría de la obra. Esto se debe a que presentan los versos acrósticos que permiten identificar al bachiller Fernando de Rojas, nacido en La Puebla de Montalván, como al menos uno de sus escritores. Los textos posliminares nos guían para descubrir ese acróstico.

Alusiones

La obra está repleta de referencias a la antigüedad grecorromana ya que se integra en la corriente humanista del pensamiento. Muchas de esas referencias son explícitas, pero otras son alusiones que los lectores universitarios de la época reconocerían fácilmente. Por ejemplo, cuando Celestina menciona "el buen atrevimiento de un solo hombre" (Auto VI, p. 146) se refiere a Sinón, guerrero de la mitología griega que preparó la trampa del famoso caballo de madera para entrar a Troya.

Imágenes

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Paradoja

El remedio para el amor-pasión que sienten Calisto y Melibea es el encuentro sexual entre ambos. Sin embargo, paradójicamente, esto los lleva a la muerte, porque es un pecado.

Paralelismo

En 'La Celestina' abundan los paralelismos: entre amos y sirvientes, entre sirvientas y prostitutas, entre jóvenes y ancianos. Un ejemplo muy claro lo aportan Calisto y sus criados. El propio Sempronio lo identifica cuando Pármeno le dice que ama a Areúsa y dice: "¿Ya todos amamos? El mundo se va a perder. Calisto a Melibea, yo a Elicia; tú de envidia has buscado con quien perder ese poco de seso que tienes" (Auto VIII, p. 173). A pesar de tener distintas posiciones económicas y distintas personalidades, los tres son hombres jóvenes y enamorados.

Metonimia y Sinecdoque

En el Auto I, Sempronio se pone de acuerdo con Celestina para engañar a Calisto y ella acepta, segura de que puede hacer el trabajo. Entonces afirma "Que no sólo lo que veo oigo y conozco; mas aún lo intrínseco con los intelectuales ojos penetro" (p. 81). La metonimia (los intelectuales ojos por la inteligencia) sirve para expresar la habilidad mental de la alcahueta, que se mantiene intacta a pesar de su vejez.

Personificación

El amor aparece personificado en varias ocasiones en 'La Celestina'. Celestina lo define mediante una serie de oxímoron: "Es un fuego escondido, una agradable llaga, un sabroso veneno, una dulce amargura, una delectable dolencia, un alegre tormento, una dulce y fiera herida, una blanda muerte" (Auto X, p. 203), que dan cuenta de su intensidad, de su poder. Ahora bien, Melibea retoma esa idea del amor como poderoso, totalizante y demandante cuando afirma: "el amor no admite sino solo amor por paga" (Auto XVI, p. 261), y Pleberio completa la personificación en su lamento final. Entre lágrimas, se dirige al amor en segunda persona, como conversando con él, y le dice: "Dulce nombre te dieron; amargos hechos haces. No das iguales galardones" (Auto XXI, p. 297).