Noli me tangere

Noli me tangere Símbolos, Alegoría y Motivos

La aurora (Símbolo)

Antes de morir, Elías dice: "¡Muero sin ver la aurora brillar sobre mi patria!" (p. 351). La aurora funciona aquí como un símbolo de libertad. Se da a entender que las Islas Filipinas están en medio de la noche, símbolo de la corrupción moral y la opresión.

María Clara (Símbolo)

El personaje de María Clara funciona como un símbolo de las Islas Filipinas. Crisóstomo Ibarra, en la primera reunión que tiene con ella, le dice: "Me parecía que eras el hada, el espíritu, la encarnación poética de mi patria, hermosa, sencilla, amable, candorosa" (p. 44).

Sobre el final de la novela, sin embargo, en consonancia con lo que sucede en su patria, con la rebelión iniciada, María Clara cambia su carácter. Deja de ser esa mujer dócil y amable. Se rebela ella también contra lo que le imponen, se niega a casarse con Linares, y entra en un convento.

De esta manera, María Clara simboliza a las Islas Filipinas en sus dos caras: la pacífica y sumisa, y la rebelde.

La nube (Símbolo)

El capítulo XXXVI se llama "La primera nube". Sin embargo, en el desarrollo del mismo no aparece ninguna nube ni nada relativo a ella. Esto se debe a que aquí la nube es utilizada como un símbolo de que algo negativo se aproxima, una amenaza. La primera nube es el signo de que el cielo se va a cubrir y, como dice Elías, la patria quedará sumida en la oscuridad. Es decir, en la corrupción moral y la injusticia.

El lobo y el rebaño (Alegoría)

En la escena del teatro del capítulo XL, el padre Salvi le pide a Don Filipo que expulse a Ibarra, ya que este está excomulgado y, según su criterio, no debería estar allí. Le dice: "¡Es dejar entrar un lobo en el rebaño!" (p. 229).

Una alegoría consiste en un encadenamiento de metáforas. En este caso, la primera metáfora está en la palabra "lobo", que remite a Ibarra. Según Salvi, Ibarra es como un lobo porque es peligroso y capaz de hacerle daño a los demás, al rebaño. El "rebaño" es, entonces, la segunda metáfora. Un rebaño de ovejas se caracteriza por ser sumiso y dócil, como el pueblo filipino, y, por lo tanto, está en peligro de ser devorado por los lobos como Ibarra.

La camisa de piña (Símbolo)

La camisa de piña funciona como un símbolo de la natividad filipina, ya que es una prenda que no utilizaban los españoles, sino los nativos. Doña Victorina de Espadaña es una nativa filipina que pretende hacerse pasar por española. El narrador aclara que, para ser tomada como tal, "cambió la camisa de piña por el traje europeo" (p. 240).