Los miserables

Los miserables Elementos Literarios

Genero

Novela

Configuración y Contexto

Francia, primeros años del siglo XIX

Narrador y Punto de Vista

La novela está narrada en tercera persona. El narrador nunca revela su nombre y nos ofrece una perspectiva omnisciente respecto de los eventos que se desarrollan.

Tono y Estado de Ánimo

El tono y el estado de ánimo de la novela varían mucho. Víctor Hugo se preocupa por describir las situaciones que enfrentan los indigentes y marginados, y el tono suele ser serio y solemne. La novela también se caracteriza por una fuerte corriente de idealismo, y el tono a menudo se vuelve revolucionario y esperanzador. Entremezclado con estos grandes temas hay una nota sutil de humor.

Protagonista y Antagonista

El protagonista principal es Juan Valjean, y su antagonista es Javert. Los protagonistas secundarios son Mario, Cosette y los miembros de la Sociedad ABC, y sus antagonistas son los Thenardier, la pandilla del patrón Minette y la Guardia Nacional

Conflicto Principal

Hay muchas líneas argumentales en la novela, y cada una tiene su propio conflicto: la lucha de Enjolras por una Francia más democrática, el amor no correspondido de Eponina por Mario, la misión de Valjean de sobrevivir en el mundo como un hombre justo, y así sucesivamente. Sin embargo, el momento de la historia en el que coinciden varios de estos personajes es en la barricada, cuando los revolucionarios se enfrentan a la Guardia Nacional. De alguna manera, podríamos decir que el conflicto mayor que aparece en la novela es el levantamiento de los revolucionarios buscando una Francia más justa y equitativa. Todos los otros conflictos, en mayor o menor medida, son motivados por la pobreza y la injusticia que imperan en la Francia de principios del siglo XIX.

Climax

El clímax llega con la barricada de Enjolras durante el levantamiento de 1832. Todos los personajes principales (Valjean, Mario, Javert, la Sociedad ABC, Eponina, Mabeuf) se encuentran reunidos en este conflicto, y otros (Cosette, los Thenardier) serán directamente impactados por el resultado.

Presagio

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Atenuación

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Alusiones

El obispo Myriel llega a la ciudad de Senez montado en un burro. Bromea sobre lo incómodo que son los medios de transporte económicos, y hace alusión a Jesús entrando en Jerusalén en un burro, lo cual ocurre en Marcos 11: 1-11. Aunque Myriel no tiene intenciones de compararse directamente con Jesús más allá de lo similar de la escena entre el pasaje bíblico y cómo él ha llegado a Senez, esta alusión insinúa que la bondad de Myriel podría ser comparable a la de Jesús.

Imágenes

Ver sección Imágenes.

Paradoja

La novela describe con frecuencia las peculiares paradojas y contradicciones de la vida. Por ejemplo, los transeúntes gritan y se ríen después del injusto arresto de Fantina. Víctor Hugo hace referencia en la novela a que muchas veces la peor degradación del ser humano da lugar a la alegría y la risa. Es cruelmente paradójico cómo la gente se ríe de la desgracia de Fantina.

Paralelismo

La diferencia entre Champmathieu y Valjean / Señor Magdalena es un ejemplo de paralelismo. Los dos hombres se ven muy similares y provienen de la misma región. Sin embargo, el encuentro de Valjean con Myriel lo ha colocado en un camino de rectitud, mientras que Champmathieu todavía está sumido en la misantropía y la ira. Champmathieu proporciona un ejemplo de lo que le podría haber pasado a Valjean si no hubiera conocido a Myriel.

Metonimia y Sinecdoque

Myriel emprende un peligroso viaje hacia las montañas, a pesar de su avanzada edad y los violentos bandidos que deambulan por allí. Cuando el alcalde de un pueblo cercano lo insta a que abandone esta misión, Myriel responde con la siguiente cita: "No vivo, ni estoy en el mundo para guardar mi vida, sino para guardar las almas" (p.19). Esto equipara almas a personas, un ejemplo de sinécdoque (sustituir una parte de algo por el todo cuando se describe a una persona, lugar o cosa). Esta cita establece que Myriel valora a las personas por su potencial espiritual más que por sus medios o hechos terrenales.

Personificación

Francia se personifica con frecuencia en forma humana: a veces como una mujer, una madre o una figura noble. En la página 767, Francia se describe así: “(…) aparece una prodigiosa luz, la boca abierta de la fuerza retrocede, y el ejército, ese león, ve entre sí, de pie y tranquilo, ese profeta: Francia”. El país de Francia es casi un personaje completo en el libro, uno que oscila entre varias formas, abarcando la diversidad de la nación. En este caso se personifica al país de Francia como un profeta, un hombre sabio que tiene la capacidad de ver cuál es el mejor futuro posible.