Los tres mosqueteros

Los tres mosqueteros Símbolos, Alegoría y Motivos

Los anillos (Símbolo)

Un anillo suele simbolizar el compromiso y la fidelidad. Por el contrario, en la novela los anillos son símbolo de intriga y engaño. El anillo que recibe d'Artagnan como premio a su lealtad para con la reina, en realidad premia una misión que tenía como propósito encubrir una infidelidad. Además, ese anillo representa un peligro precisamente porque simboliza la complicidad de d'Artagnan al conspirar contra el rey y el cardenal. Tampoco ese anillo guarda un significado demasiado especial para d'Artagnan cuando se deshace del objeto con relativa facilidad el momento en que él y sus amigos necesitan dinero.

El anillo de zafiro que Milady le regala a d'Artagnan cuando piensa que se lo está regalando al conde de Wardes también desafía la simbología más clásica de un anillo. Milady le regala a su amante un anillo que había recibido ella de su primer marido, Athos. Tanto Athos como Milady entregan ese anillo por equivocación. Los dos destinatarios de ese regalo son deshonestos con sus parejas. La rotura en uno de los costados del zafiro no solo es lo que permite descubrir el origen de ese anillo, sino que también simboliza el defecto de ese amor basado en mentiras. Al igual que con el primer anillo, deshacerse de él resulta fácil precisamente porque representa algo negativo.

La marca de la flor de lis (Símbolo)

La marca que tiene Milady en el hombro representa su condena por los crímenes cometidos. Esa marca hace de su cuerpo algo problemático porque más allá de ser su arma de seducción, también la hace vulnerable al revelar ese pasado. Al tratarse de una marca que no se puede borrar, la flor de lis anticipa el hecho de que Milady no va a poder escaparse de su pasado para siempre; tarde o temprano tendrá que responsabilizarse por sus acciones.

Amos y criados (Motivo)

A lo largo de la novela, la relación entre amos y criados es un elemento recurrente que sirve para comunicar características y valores de los personajes. Cada uno de los cuatro amigos tiene un criado que refleja algún aspecto de su personalidad. Mosquetón, el criado de Porthos, acepta trabajar con el único beneficio de estar siempre bien vestido. Bazin está casi más interesado que el propio Aramís en que se ordene sacerdote. Grimaud ha desarrollado la capacidad de comunicarse sin tener que hablar para acomodarse a los deseos de Athos. Asimismo, la relación entre amos y sirvientes permite explorar en más detalle el tema de la lealtad y las clases sociales. Cada estamento en esta sociedad le debe lealtad a su superior; el resultado de eso es que el sistema se sostiene y cada individuo contribuye a la estabilidad del reino.

Las mujeres como perdición (Motivo)

En varias ocasiones los personajes mencionan explícitamente que las mujeres son causa de perdición para los hombres o bien aluden a alguna experiencia personal en que este fue el caso. La recurrencia de este tipo de relaciones remarca cuán peligrosa puede ser Milady, pero también cuán insensatos pueden ser los hombres enamorados, aun cuando la mujer es buena y virtuosa. En algunos casos, la visión sobre la mujer está imbuida de cinismo por experiencias pasadas, como en el caso de Athos. En otras ocasiones, están motivadas por celos como en el caso de Aramís, que constantemente duda de la fidelidad de su amante.

Los herretes de la reina (Símbolo)

Los herretes de la reina simbolizan su castidad. En primer lugar, los herretes son un regalo que le hace su esposo. Además, las joyas en general son algo íntimo. Cuando Ana decide regalarle los herretes al duque, el gesto alude a la naturaleza de la relación entre ellos, pero también hace más grave la traición. El detalle de que los herretes sean doce y que el cardenal mande a Milady a robar dos también es significativo. En lugar de que la reina se presente sin la totalidad de los herretes apunta a que la castidad de la reina está mancillada. Todo lo que el duque está dispuesto a hacer para evitar que la reina quede expuesta demuestra la discreción del hombre galante que protege el nombre y el honor de su amada.