La casa de Asterión

La casa de Asterión Guía de Estudio

La casa de Asterión” es uno de los cuentos más cortos y aclamados de Jorge Luis Borges. Aunque se tienda a encasillarlo, a falta de mejores opciones, dentro de los géneros de cuento de horror o cuento fantástico, lo cierto es que el relato no termina de ajustarse completamente a ninguno de ellos. En parte, esto se debe al carácter eminentemente conmovedor y humano que adquiere su monstruoso protagonista a través del recurso del monólogo en primera persona.

En Borges, se suele afirmar, la escritura siempre es reescritura. Muchas veces, su obra parte de la reformulación de un texto ajeno que tanto puede provenir de la filosofía, la religión o la tradición literaria. Desde allí, el autor se permite reflexionar sobre problemas literarios y textuales, como el punto de vista, la autoría, la tradición y la forma literaria, entre otros. Como vemos, tanto su obra como su propia figura encuentran en la biblioteca su elemento natural. En palabras de la especialista Beatriz Sarlo, “La biblioteca abre, también, todas las promesas del "arte combinatorio", la repetición con variaciones, el corte y el pastiche, las estrategias a las que Borges confiará su literatura posterior. En la biblioteca está una reserva infinita de peripecias, es decir: la sustancia misma que la ficción debe buscar allí y no en la acumulación fluida e indeterminada de lo real” (1995: 44).

“La casa de Asterión”, entonces, debe comprenderse en relación con este diálogo constante con la tradición literaria, fundamental en la producción de Borges. Autor culto y ávido lector del mundo clásico, la presencia de personajes, temas y motivos de la cultura grecolatina es una constante en los poemas, ensayos y cuentos del autor. Su Asterión, en este sentido, no es más que una reformulación del famoso minotauro de la mitología griega. Sin embargo, no se trata de una reproducción fidedigna del monstruo clásico, sino que se sirve de él para transmitir sus propias reflexiones acerca de la infinitud, la identidad, el destino y la tradición, temas eminentemente borgeanos.

“La casa de Asterión” fue publicado originalmente en 1947 en el diario Los anales de Buenos Aires y, en 1949 y con unas pocas modificaciones, en El Aleph, uno de sus más aclamados libros de cuentos. El relato recibió muchos comentarios positivos por parte del público y la crítica. Autores como Julio Cortázar, Emilio Carilla, Estela Canto y Enrique Anderson-Imbert lo han reseñado positivamente o han escrito artículos sobre él. Al día de hoy, se ha convertido en un verdadero clásico y, por su corta extensión y aparente simplicidad, es uno de los textos ‘de entrada’ al fascinante y complejo universo literario de Borges.