Las medias rojas

Las medias rojas Símbolos, Alegoría y Motivos

Las medias rojas (Símbolo)

Las medias rojas de Ildara son un símbolo múltiple. Por un lado, simbolizan la libertad, la rebeldía juvenil y el profundo deseo de Ildara de partir del mundo rural, en el que vive con su padre, hacia un nuevo rumbo. También, el de romper con la tradición que se le impone y comenzar a tomar elecciones para su vida. Ella las compra con el primer adelanto de dinero que le da el hombre que la llevaría a América; es decir, las medias son lo primero que consigue de ese viaje, incluso antes de concretarlo.

A su padre le miente, al decirle que las ha obtenido con la venta de huevos. De esta forma, como el secreto viaje planeado, la forma de adquirirlas también se oculta. Sin embargo, el símbolo es demasiado evidente, dado que su padre lo sospecha. Para él también funcionan como un símbolo de huida y libertad para su hija, por ello la golpea: "Fue un instante de furor, en que sin escrúpulo la hubiese matado, antes que verla marchar" (14).

Además, las medias simbolizan la belleza. Su adquisición es un gusto que se da esta muchacha para embellecerse. Para poder escapar y embarcarse, como se deja ver en el final del relato, es condición ser una mujer sana y bella. El padre la golpea porque percibe esto y, entonces, la lesiona y afea.

Por otro lado, para la visión misógina de su padre, las medias y la coquetería femenina simbolizan la inmoralidad y la promiscuidad: "Ya te cansaste de andar descalza de pie y pierna, como las mujeres de bien, ¿eh, condenada? ¿Llevó medias alguna vez tu madre?" (13).

Por último, las medias no son de un tono cromático oscuro, como todo lo que los rodea en esa casa, sino que son de un "color vivo" (12): el rojo enfatiza allí la presencia del objeto prohibido para la ley paterna, pero que simboliza la búsqueda de libertad para la hija.

El barco (Símbolo)

El barco simboliza el progreso y la liberación: es la posibilidad de una vida mejor y el vehículo hacia la riqueza. Así lo entiende Ildara, que planea, cumplida la mayoría de edad, embarcarse para dejar España:

Libre de la autoridad paterna, la esperaba el barco, en cuyas entrañas tantos de su parroquia y de las parroquias circunvecinas se habían ido hacia la suerte, hacia lo desconocido de los lejanos países donde el oro rueda por las calles y no hay sino bajarse para cogerlo (13).

El diente (Símbolo)

Tras los golpes recibidos, Ildara pierde parte de su dentadura: "Un diente bonito, juvenil, le quedó en la mano" (14). Ese diente perdido es el símbolo de la belleza perdida de la chica y del fin de sus sueños de escapar de la casa paterna: "Los que allá vayan, han de ir sanos, válidos, y las mujeres, con sus ojos alumbrando y su dentadura completa" (14).

La saya (Símbolo)

La vestimenta tradicional de la muchacha, la saya, aparece en el cuento como una prenda remendada y sucia. Esta contrasta con las medias rojas que luce debajo. En ese contraste con las novedosas y coloridas medias se pergeña un significado: esa pollera es un símbolo de la tradición y la vida rural femenina y, además, por su estado, de la pobreza en la que viven Ildara y Clodio.

La mayoría de edad (Símbolo)

Ildara, menor de edad, vive bajo el techo de la casa paterna y debe cumplir con las obligaciones que su padre le impone. Como él es un hombre mayor y viudo, no puede trabajar solo el campo que arrienda y, de acuerdo con el sistema patriarcal imperante, no se ocupa de las tareas domésticas como si fuera un determinismo del género. Ildara está esperando cumplir años para así poder liberarse de las regulaciones del padre y escapar de allí. Según el Código Civil español de 1889, la mayoría de edad está fijada en los 23 años, aunque las mujeres, para poder abandonar la casa paterna antes de los 25, deben hacerlo con el permiso de los progenitores. Es esa mayoría de edad el símbolo de liberación para la chica: "Cumplida la mayor edad, libre de la autoridad paterna, la esperaba el barco" (13).