Lástima que sea una puta

Lástima que sea una puta Ironía

Ricardetto se refiere a Soranzo como un “caballero noble y virtuoso”, aunque realmente piensa todo lo contrario de él (Ironía situacional)

En el tercer acto, cuando Anabella se desmaya, Ricardetto, disfrazado de médico, le recomienda a Florio que la case cuanto antes y sugiere que Soranzo es un buen candidato. El falso médico llega a indicar que se trata de “un caballero noble y virtuoso” (p. 135) cuando, irónicamente, opina lo contrario de él. Con ello, el espectador comprende que Ricardetto ha descubierto que Anabella está embarazada y la sugerencia de que debe casarse con Soranzo es parte de su venganza contra este último.

Florio se enorgullece del “celo cristiano" y el "amor fraternal” (p.136) que expresa Giovanni por Anabella, sin saber que en realidad se trata de un amor incestuoso (Ironía situacional)

Tras el desmayo de Anabella, Giovanni se muestra muy preocupado por el estado de salud de su hermana. Florio expresa su admiración y orgullo ante el amor fraterno y cristiano que demuestra su hijo. Irónicamente, el amor que siente el joven es expresamente carnal e incestuoso, atenta contra todos los preceptos del cristianismo que Florio pregona y amenaza con destruir a toda la familia.

Putana, la encargada de velar por la educación moral de Anabella, es la primera en promover su relación incestuosa con Giovanni (Ironía situacional)

Resulta irónico que sea Putana, la criada que está a cargo de la educación moral de Anabella, el único personaje, por fuera de los hermanos, que observa con buenos ojos la relación entre ellos. Mientras que debería esperarse que la criada prepare a Anabella para cumplir con su rol social de esposa (y que se mantenga, en consonancia, virgen hasta el matrimonio), este personaje hace exactamente lo contrario, y le aconseja a la joven que se aproveche al máximo de los hombres y tenga tantas relaciones como pueda.

Cuando Anabella enferma, llaman a un médico para que la atiendan. Lo que los espectadores sabemos y los personajes ignoran es que ese médico es, en realidad, el vengativo Ricardetto (Ironía dramática)

Ricardetto regresa a Parma disfrazado de médico para vengarse de su esposa, Hipólita, y de Soranzo. Cuando Anabella se descompensa, Florio lo llama para que oficie como médico sin conocer realmente su identidad. Ricardetto aprovecha el engaño para ocultar que la joven está embarazada y sugerir que debe casarse cuanto antes, proponiendo a Soranzo como el mejor candidato. Así, aprovecha la situación para ejecutar su venganza. El hecho de que su identidad no esté revelada para los personajes, pero sí para los espectadores constituye un ironía dramática.