El abanico de Lady Windermere

El abanico de Lady Windermere Ironía

Al principio de la obra, Lady Windermere odia a Mistress Erlynne y Lord Windermere la defiende; al final, es al revés

En el Acto Primero, Lady Windermere descubre que Lord Windermere le ha estado dando grandes sumas de dinero a Mistress Erlynne y forma una opinión bastante desfavorable sobre la mujer. Cerca del final del Acto Primero, las opiniones contrastantes de Lady y Lord Windermere chocan cuando Lord Windermere insta a su esposa a invitar a la mujer a la fiesta de cumpleaños esa noche y permitirle conocer a otras mujeres y entrar en la sociedad. Lady Windermere se opone firmemente a esto, creyendo que Mistress Erlynne es una mujer grosera que quiere robar los maridos de otras personas.

Sin embargo, al final de la obra, Lady Windermere y Lord Windermere intercambian opiniones. Esto queda claro en la conversación en la que Lady Windermere dice que quiere visitar a Mistress Erlynne antes de que esta deje el país, y Lord Windermere intenta disuadirla para que no lo haga. Más allá de que existe una fuerte carga de ironía en el hecho de que ambos cambien tan radicalmente sus posturas frente a Mistress Erlynne, también vale la pena mencionar que dichos cambios se producen por cierta información que tiene cada uno de los personajes y que el otro ignora: Lord Darlington sabe que Mistress Erlynne es la madre de Lady Windermere, cosa que esta última desconoce, mientras que Lady Windermere desarrolla cierto vínculo afectivo con Mistress Erlynne a partir de que esta la ayuda en casa de Lord Darlington, hecho que Lord Windermere ignora. En ese sentido, también podríamos hablar de un cierto grado de ironía en la falta de comunicación que existe en la pareja de los Windermere, y que los lleva a estar dos veces en desacuerdo respecto de Mistress Erlynne.

Lord Windermere ignora la nota que le deja su esposa, y que el público conoce (Ironía dramática)

Abrumada por la idea de que su esposo la está engañando y por la confesión de amor de Lord Darlington, Lady Windermere deja su propia fiesta temprano y deja una nota para que su esposo la encuentre. Aunque el público nunca descubre el contenido exacto de la misma, se entiende que en ella Lady Windermere informa que se escapa de Inglaterra con Lord Darlington. Mistress Erlynne toma esta nota y la destruye, lo que implica que cuenta con toda la información sobre su contenido. Mientras tanto, Lord Windermere no sabe que alguna vez hubo una nota, y mientras espera en la casa de Lord Darlington, Lady Windermere cree que su esposo ya la ha leído o lo hará pronto. El hecho de que tanto el público como Mistress Erlynne tengan más información que el propio Lord Windermere respecto de la nota que estaba dirigida hacia él es un ejemplo de ironía dramática. Al mismo tiempo, contribuye a generar suspenso en torno a si él descubrirá en algún momento la existencia de esa nota y el aviso que contenía.

Lady Windermere nunca se entera de que Mistress Erlynne es su madre, mientras que el publico lo sabe (Ironía dramática)

Cuando comienza el Acto Cuarto, parece que todo volverá a la normalidad: Lord y Lady Windermere hacen las paces; Lord Windermere no encontró la nota de Lady Windermere y espera llevar a su esposa al campo antes de que Mistress Erlynne pueda revelarle a su hija su verdadera identidad. Sin embargo, Lady Windermere le dice que quiere ver a Mistress Erlynne una última vez. Mientras su esposo protesta, Mistress Erlynne llega a la casa. Lo que sigue es una interacción larga y llena de suspenso en la que la Mistress Erlynne insinúa, pero no revela por completo, que ella es la madre de Lady Windermere. Incluso hablan de lo que supuestamente le sucedió a la madre de Lady Windermere y del hecho de que Mistress Erlynne y Lady Windermere tienen el mismo nombre de pila. En esta escena, la ironía dramática se basa únicamente en la falta de información de Lady Windermere, mientras que Lord Windermere, Mistress Erlynne y el público conocen la verdad de la situación.

La duquesa de Berwick se burla de su hija por ser atrevida y charlatana, aunque Agatha es muy introvertida (Ironía situacional)

Hay una ironía un poco más sutil que las precedentes que se manifiesta en la relación entre la duquesa de Berwick y Agatha, su hija. Estas dos mujeres muestran un ejemplo de una relación madre-hija que Lady Windermere, quizás afortunadamente, nunca llega a experimentar. La duquesa de Berwick se burla y reprende a su hija por ser charlatana y atrevida, aparentemente en serio, mientras que en realidad su hija parece tener una personalidad atrofiada y carece de habilidades para conversar debido, aparentemente, a lo charlatana e invasiva que es su madre.