Las Aventuras de Huckleberry Finn

Las Aventuras de Huckleberry Finn Resumen y Análisis de los Capítulos 21 a 25

Resumen

Capítulo 21

El Rey y el Duque ponen su atención en realizar escenas de Shakespeare. El Rey aprende las líneas de Julieta y practica lucha con espada con el Duque para representar una parte de Ricardo III. El Duque decide que sería un gran bis que el Rey realice el soliloquio de Hamlet. Lamentablemente, sin el texto en cuestión, el Duque debe reconstruir las famosas líneas de memoria. El resultado final es bastante diferente al verdadero soliloquio, pero aún contiene algunos elementos de drama.

Los hombres se detienen en un pueblo cercano y deciden montar su espectáculo. Alquilan el palacio de justicia por una noche e imprimen volantes proclamando cuán maravilloso será el espectáculo. Desafortunadamente, también hay un circo en la ciudad, pero esperan que la gente igual asista a sus representaciones dramáticas.

El día del espectáculo, un hombre llamado Boggs cabalga hacia la ciudad. Es un borracho que va todos los meses y amenaza con matar a un hombre, pero en realidad nunca daña a nadie. Esta vez, él busca un Coronel Sherburn, el hombre más rico de la ciudad y dueño de una tienda. Boggs se para fuera de la tienda e insulta a los gritos al Coronel. El Coronel sale de su tienda y le dice a Boggs que aguantará los insultos hasta la una en punto, y que después de eso lo matará si pronuncia una sola palabra más. Boggs continúa, implacable, y exactamente a la una de la tarde aparece el Coronel y mata a Boggs en el acto. En ese momento exacto, se acerca la hija de Boggs esperando salvar a su padre, pero llega demasiado tarde. Después de enterrar a Boggs, la multitud se convierte en una gran masa y concluye que Sherburn debe ser linchado por el asesinato.

Capítulo 22

La multitud viaja a la tienda de Sherburn y destroza la cerca frontal. Se detienen cuando aparece Sherburn con una escopeta y se para con calma frente a ellos. Les da un sermón sobre lo patéticos que son, les dice que están siendo guiados por un hombre a medias, Buck Harkness, y los llama cobardes a todos cobardes. Cuando termina su discurso, amartilla su arma y la multitud corre en todas las direcciones.

Huck se va al circo, que está en la ciudad hasta muy tarde esa noche, y después del cual el Duque y el Rey planean hacer su espectáculo. Se cuela y observa todas las divertidas actividades, como el payaso y las vedettes. Huck luego comenta que es el mejor circo que haya presenciado y el más divertido.

Esa noche, el espectáculo de Shakespeare es un desastre: asisten solo doce personas y ninguna se queda hasta el final. En respuesta, el Duque imprime algunos folletos nuevos promocionando un espectáculo titulado El Real Nohaytalrey. A continuación, agrega inteligentemente una línea que dice "prohibida la entrada a mujeres y niños", y comenta que si esa línea no lleva audiencia, entonces él no conoce Arkansas.

Capítulo 23

El Real Nohaytalrey abre en una casa llena de hombres. El Duque los saluda y anuncia, con bombos y platillos, al Rey. El Rey aparece completamente desnudo, cubierto de pintura y gateando en cuatro patas. La audiencia se ríe a carcajadas y alienta al rey para que haga lo mismo dos veces más. Entonces el Duque agradece a todos y les desea buenas noches.

Los hombres se enfurecen porque el programa es tan breve y se dan cuenta de que han sido "vendidos" o engañados. Pero antes de que se lancen al escenario para protestar, un hombre se pone de pie y les dice que serán el hazmerreír del pueblo si alguna vez se revela cómo fueron engañados. Todos acuerdan irse y promocionar el espectáculo por ser maravilloso, para que el resto del pueblo también sea estafado.

Como resultado, la actuación de la noche siguiente también está llena, y el público se va igual de enojado. La tercera noche aparecen todos los hombres llevando consigo huevos podridos, gatos muertos y otros objetos asquerosos. El Duque le paga a un hombre por vigilar la puerta y él y Huck corren hacia la balsa. Inmediatamente la empujan hacia el río y el Rey emerge de la tienda donde él y Jim se han estado escondiendo todo el tiempo. Juntos, los dos estafadores han hecho cuatrocientos sesenta y cinco dólares.

Esa noche, Jim lamenta por no poder ver a su esposa y a sus hijos. Huck comenta que Jim
se preocupa tanto por su familia como lo haría una persona blanca. Jim luego le cuenta a Huck una historia de un día cuando estaba con su hija, Elizabeth. Jim le dijo que cerrara la puerta y ella se quedó allí, sonriéndole. Jim se enojó porque ella no obedecía y le gritó, hasta que finalmente la golpeó en la cabeza por no escucharlo. Diez minutos después, Jim regresó y su hija aún no había cerrado la puerta. Estaba parada en el mismo lugar, llorando. En ese momento, un viento fuerte azotó al puerta detrás de ella, haciendo saltar a Jim. Sin embargo, su hija nunca se movió ni una pulgada. Jim se dio cuenta de que su pobre hija había perdido la audición. Jim le cuenta a Huck que al darse cuenta rompió a llorar y agarró a su hija para darle un abrazo. Desde entonces, se ha sentido terrible por cómo la trató aquella vez.

Capítulo 24

Para no atar a Jim con cuerdas durante el día (ya que él ha estado fingiendo ser un esclavo fugitivo), el Duque descubre una solución mejor. Pinta a Jim de azul y lo hace usar un disfraz. Entonces, escribe un letrero que dice: "Árabe enfermo, pero inofensivo, cuando no está trastornado". Jim se pone contento por poder moverse.

El Rey y Huck cruzan el río y se encuentran con un joven palurdo que espera el ferry a Orleans. Él procede a contarles cómo murió Peter Wilks, dejando todo su patrimonio a sus hijas y hermanos. Los dos hermanos aún no han llegado de Inglaterra, lo que entristeció mucho al hombre antes de morir. Al Rey le interesa mucho esta historia y reúne todos los detalles que puede.

Una vez que tiene todos los detalles, el Rey va hacia el Duque y le cuenta toda la historia. Los dos hombres se ponen de acuerdo para hacerse pasar por los hermanos de Peter Wilks de Sheffield, Inglaterra. Juntos, con Huck actuando como un sirviente, toman un barco de vapor que los lleve a la ciudad y los deje allí. Su estratagema funciona perfectamente y cuando les dicen que Peter está muerto, ambos hombres lanzan un gran grito y se lamentan. Huck comenta que, "Era suficiente para que cualquiera se avergonzara del género humano."

Capítulo 25

Los dos estafadores son llevados por la multitud que los recibió a su llegada para visitar a la familia, que consta de tres niñas huérfanas: Mary Jane, Susan y Joanna. Todos intercambian abrazos y llantos, y entonces el Rey y el Duque van a ver el ataúd. Los dos hombres rompen a llorar de nuevo, y finalmente el Rey hace un discurso sobre lo triste que es la situación. Terminan besando a todas las mujeres en la frente y actuando como si tuvieran el corazón roto. Huck comenta que toda la escena es "desagradable".

El rey y el duque descubren que han recibido la mayor parte de las propiedades y tres mil
dólares en efectivo. Las tres chicas también han recibido tres mil dólares y la casa en la que viven. Wilks les dirá en qué parte del sótano podrán encontrar el efectivo; los dos hombres bajan las escaleras y lo encuentran. El Rey y el Duque cuenta el dinero y les faltan cuatrocientos quince dólares. Para aliviar cualquier sospecha, agregan a la pila el dinero que hicieron por El Real Nohaytalrey. Entonces, para ponerse el pueblo de su lado, entregan gentilmente su parte del dinero a las tres niñas, sabiendo que puede volver a robarlo en cualquier momento.

El Rey da un discurso y se desvía del tema tontamente. Un tal Doctor Robinson se mete en la multitud, escucha al Rey y se ríe con ganas, llamando al Rey un fraude porque su acento británico es una mala imitación. La gente del pueblo se reúne alrededor del Rey, que ha sido tan generoso, y lo defiende. El Doctor advierte a Mary Jane directamente, pero en respuesta ella le entrega la bolsa de dinero al Rey y le pide que lo invierta en ella. El médico les advierte una última vez sobre los errores que están cometiendo y luego se va.

Análisis

En estos capítulos, Twain ofrece otra vez un comentario sobre la naturaleza humana y presenta un retrato mordaz de la sociedad. La "versión" de Shakespeare que ofrece Twain, la muerte de Boggs, los sentimientos de Jim sobre su familia y el Real Nohaytalrey buscan inducir al lector al análisis de las tonterías de la sociedad. Huck ayuda en esta inducción al agregar comentarios que llevan las críticas de Twain hacia un enfoque más específico.

El uso de Shakespeare es a la vez divertido y trágico. Cuando se describe el soliloquio masacrado de Hamlet, es inmediatamente obvio que el Duque ha confundido las líneas. Por otra parte, la imagen del Rey, con su cabello blanco y sus bigotes, actuando de Julieta profundiza aún más el carácter de farsa de las obras de teatro .

La muerte de Boggs enfoca la atención del lector en un aspecto mucho más serio de la sociedad. Boggs es asesinado de un disparo frente a una multitud de personas, incluida su hija. La falta de respeto que Boggs mostró al Coronel Sherburn difícilmente justifique el asesinato. Twain se burla de la sociedad por sus cobarde accionar, ya que la multitud, lista para linchar a Sherburn, es fácilmente manipulada y sucumbe a la cobardía.

Twain también hace varios comentarios agudos sobre la actitud general hacia los negros cuando Jim habla de su familia. Huck comenta que se sorprende al descubrir que Jim está casi tan preocupado por su familia como lo estaría una persona blanca. Esta actitud prevaleciente, a menudo invocada para justificar el desmembramiento de familias esclavas, está comenzando a ser superada por Huck. La conmovedora historia de Jim sobre su hija Elizabeth, en la que la golpea por no obedecerle, es para Huck una poderosa indicación de que Jim se preocupa más por sus hijos de lo que su padre alguna se preocupó por él.

El Real Nohaytalrey es quizás la creación filosófica más brillante de Twain, un espectáculo en el que la audiencia ve exactamente aquello por lo que paga: nada. Twain no solo describe el espectáculo con precisión a través del título, sino que también hizo añadir al Rey y al Duque la frase "Prohibida la entrada a mujeres y niños". Por lo tanto, el espectáculo hace un comentario sobre la naturaleza humana, a saber, que no podemos imaginar un espectáculo que verse sobre nada, incluso cuando el mismo título lo anuncia. A los hombres se los engaña aún más y se lo incita a pensar que el Nohaytalrey debe ser un espectáculo grandioso y sexual, ya que sus esposas no son admitidas. Además, para evitar la vergüenza, los hombres engañados luego abalan el espectáculo frente a sus amigos. Una vez más, Twain hace una revisión mordaz de sus conciudadanos demostrando cuán frágiles son los egos humanos. La función final, que realmente no existe ya que el Duque y el Rey se escapan antes de que comience, es un golpe para los dos estafadores, que una vez más les dan a los ciudadanos exactamente aquello por lo que pagan. Uno se pregunta si es posible declararlos culpables de un delito, considerando que, en realidad, fueron honestos respecto al contenido del espectáculo.

Sin embargo, la siguiente aventura de los estafadores prueba que son individuos realmente despreciables. El Duque y el Rey se hunden aún más en el abuso de la credulidad y de la naturaleza humana al fingir ser los tíos de tres niñas huérfanas con el objetivo de robarles la herencia. Las opiniones de Huck sobre esta argucia son claras, en tanto llama al Rey y al Duque "asquerosos" y destaca que está "avergonzado de la raza humana".

Estos capítulos nos ofrecen una gran cantidad de nuevas ideas sobre Huck Finn. Obviamente está madurando en sus puntos de vista, como lo demuestra su creencia de que las personas blancas y negras no son tan diferentes. También está pasando de ser un un niño que carece de una moral firme a convertirse en un hombre comprometido con ciertos valores. Por lo tanto, sus comentarios ya no son meramente descriptivos, sino que que son cada vez más evaluativos. Se está volviendo obvio que en breve Huck ya no se conformará con apartarse y dejar que las cosas pasen, como lo sugiere la metáfora de dejarse llevar río abajo. En cambio, Huck tomará una posición y se hará valer como individuo. Sus actitudes eventualmente darán fruto en sus acciones, marcando el paso final en su camino hacia la madurez.