Tartufo

Tartufo Elementos Literarios

Genero

Teatro - Comedia

Language

Francés

Configuración y Contexto

París, segunda mitad del siglo XVII.

Narrador y Punto de Vista

N/A

Tono y Estado de Ánimo

Cómico y, por momentos, dramático.

Protagonista y Antagonista

El protagonista es Tartufo, pese a ser el villano, y su antagonista es la familia de Orgon, que intenta abrirle los ojos a este último sobre la deshonestidad de Tartufo.

Conflicto Principal

Tartufo engaña a Orgon mostrándose como un hombre honesto y piadoso para obtener beneficios de él.

Climax

El clímax tiene lugar al final del Tercer Acto, cuando los intentos de la familia por develar las verdaderas intenciones de Tartufo parecen condenados al fracaso, y Orgon, más confiado que nunca, se compromete a entregarle a Tartufo todos sus bienes.

Presagio

Ya desde el primer acto, Dorina afirma que Tartufo está sacando gran provecho de Orgon, y que eso puede tener terribles consecuencias.

Atenuación

N/A

Alusiones

Una parte de la crítica ha leído una alusión al Rey Luis en la figura bondadosa, sabia y generosa del Príncipe. Es importante considerar que Molière y Luis XIV tenían una buena relación y, además, que el autor debía ganarse la confianza y el favor del Rey para que la obra pudiera llevarse a cabo.

Imágenes

Ver sección Imágenes.

Paradoja

N/A

Paralelismo

N/A

Personificación

"Yo sé cómo hablo, y el cielo ve mi corazón. No soy esclavo de las hipocresías" (p.8).

En esta frase, pronunciada por Cleante, hay dos personificaciones. La primera es "el cielo ve mi corazón" y la segunda es "No soy esclavo de las hipocresías". Los elementos personificados (es decir, dotados de cualidades de personas) son el cielo y las hipocresías. Estas personificaciones son interesantes porque el cielo (que se nombra para hacer referencia a Dios y la religión) y la hipocresía son precisamente dos elementos dentro de la obra que tienen el poder de dominar a los personajes, sobre todo, a Orgon.

Uso de Dispositivos Dramáticos

En dos escenas diferentes, un personaje se esconde para escuchar una conversación. Este recurso dramático es muy usual en el teatro clásico, y aquí Molière lo utiliza con la finalidad de hacer avanzar la trama a través de lo que se descubre en dichas conversaciones, y por otro lado, para generar ironía dramática: Tartufo es el único que ignora que está siendo escuchado por otro personaje. El público, a través de este recurso dramático, logra saber más que el personaje principal.