El Guardian Entre el Centeno

El Guardian Entre el Centeno Resumen y Análisis de capítulos 1 y 2

El libro comienza con Holden Caulfield, el narrador, dejando en claro que no va a recontar su niñez y toda esa basura del estilo de “David Copperfield” ya que estos detalles lo aburren. Holden describe a sus padres como buenas personas pero demasiado sentimentales. En vez de contar toda su historia, Holden promete contar lo que le sucedió alrededor de la Navidad anterior, antes de que decidiera tomar su vida más despacio. También menciona a su hermano, D.B., quien se encuentra en Hollywood “prostituyéndose.” Holden era un estudiante en la Escuela Preparatoria Pencey en Agerstown, Pensilvania y se burla de los anuncios de la escuela, que claman estar moldeando a los muchachos en hombres inteligentes y de bien desde 1888. Holden comienza su historia durante el Sábado del juego de football con Saxon Hall, un evento muy importante para la preparatoria Pencey. Selma Thurmer, la hija del director, está en el juego, pero Holden no se encuentra allí. Aunque ella no sea atractiva y hasta pueda parecer un poco patética, para Holden ella es una buena chica ya que evita ensalzar a su padre el director. Holden, el encargado del equipo de Esgrima, acaba de regresar de Nueva York con el equipo. Aunque el equipo se suponía enfrentar a la escuela McBurney, Holden olvidó los floretes en la estación de trenes. Los miembros del equipo se enfurecen con Holden, pero este no puede evitar ver el lado divertido de la situación. Holden decidió no ir al juego debido a su nueva falta de popularidad. En vez de asistir al juego, Holden se va a despedir de Spencer, su maestro de historia, quien sabe que Holden no volverá a Pencey. Resulta ser que Holden ha sido expulsado del colegio por reprobar cuatro materias.

Capitulo 2 Holden encuentra la casa del señor Spencer un poco deprimente, con un olor de gotas Vicks y algo que enfatiza la vieja edad de sus habitantes. El señor Spencer está sentado y vestido con una bata vieja y le pide a Holden que se siente. Holden le cuenta como el Dr. Thurmer lo sermoneo diciéndole que la vida es como un juego y que uno debe de jugar de acuerdo a las reglas– justo antes de que lo expulsara. El señor Spencer le dice a Holden que el Dr. Thurmer está en lo correcto, pero Holden piensa que la vida es solo un juego si uno se encuentra del lado correcto.

Holden le dice al señor Spencer que sus padres van a estar muy molestos ya que esta es la cuarta escuela privada de la que ha sido expulsado. Holden cuenta que a sus dieciséis años él mide mas de seis pies de altura y tiene algunas canas, pero aun así actúa como un niño, como muchos otros le dicen comúnmente. Spencer le dice que conoció a los padres de Holden y que son grandes personas, pero Holden no presta atención. Spencer entonces le dice a Holden que lo reprobó en su clase de Historia porque Holden no sabía nada. Spencer le lee a Holden su ensayo sobre los Egipcios, el cual es horriblemente inadecuado. Al final del ensayo, Holden dejó una nota para el señor Spencer admitiendo que no estaba interesado en los Egipcios a pesar de las lecciones interesantes del señor Spencer y también diciendo que aceptaría la decisión de Spencer de reprobarlo.

Mientras Holden y el señor Spencer continúan hablando, la mente de Holden se pone a pensar en los patos del Parque Central de Nueva York. Holden se pregunta como desaparecen tan rápido y a donde es que se van. Cuando Spencer pregunta a Holden porque dejó Elkton Hills, Holden responde que es una larga historia. En resumen, todos allí eran unos hipócritas. Holden menciona en particular la calidad del director, el señor Haas, quien era encantador con todos menos los padres que “tenían una pinta un poco rara.” Holden dice tener poco interés en el futuro y le asegura a Spencer que solamente está pasando por una fase. Al marcharse, Holden escucha a Spencer decirle “buena suerte,” una frase que odia particularmente.

Análisis

En el capítulo 1, J.D. Salinger hace que el protagonista de la historia comience el libro con una declaración sarcástica y atrevida. Holden inmediatamente rechaza a idea de que los eventos que describe en la novela consisten de la historia de su vida o de que la historia contiene un mensaje superior. Holden rechaza la idea principal de literatura que se encuentra en novelas como David Copperfield, en las que la trama y la narración progresan con una moraleja, y Holden no pretende inspirar simpatía por el mismo como otro David Copperfield o Oliver Twist. Además, Holden está en una escuela privada porque sus padres son ricos. En vez de enseñar una lección moral, Salinger adopta un estilo de narración discursivo sin ningún mensaje concreto. Su historia es lo que es, y la historia de Holden es propia de él mismo, no un cuento con una lección de advertencia para otros. Como Holden insiste, su historia está libre de algún mensaje superior o un significado más grande.

Sin embargo, el lector puede aprender algo sobre la descripción de Salinger sobre historias con advertencias. Uno puede aprender sobre la historia de Holden y de cómo no vivir de mala manera. Holden indica que tiene que tomarse las cosas más despacio en el nuevo lugar donde se encuentra, lo que sugiere que se encuentra recibiendo ayuda psiquiátrica o psicológica. Los detalles en e primer capítulo indican que Holden ha decidido seguir un camino sin dirección y muy auto-destructivo. Al ser expulsado del colegio por reprobar varias materias, Holden esencialmente se describe como un fracaso perpetuo. Aun peor, en sus fallas pareciera que nadie más le importa. Su auto destrucción no le permite ver las consecuencias de sus acciones, como cuando prefiere ver el humor de las cosas y argumenta que de alguna manera no es responsable de perder el equipo de Esgrima en su viaje a Nueva York.

Holden es de muchas maneras el típico adolescente, una persona con demasiado escéptica de cualquier figura con autoridad y un chico con una actitud que es a veces cínica e ingenua. En los primeros párrafos, Holden describe a sus padres como muy sentimentales y a su hermano como alguien que se vende al consumismo de Hollywood, pero no provee ningún ejemplo del comportamiento de estos. A excepción del señor Spencer y de, hasta cierto grado, Selma Thurmer, Holden demuestra desprecio por cada personaje que menciona y por las acciones de estos. El único valor que parece admirar es la autenticidad, pero no tiene una definición concreta de lo que esto conlleva. Aunque Holden odia los intentos fallidos de Selma para mejorar su apariencia física, su mayor cumplido para con ella es la forma honesta que Selma describe a su padre. Esta atención en la autenticidad, y en la hipocresía de los demás, es un tema recurrente para Holden durante toda la novela.

A este punto, los recursos literarios que hay que notar son el fuerte punto de vista que proviene de el narrador, así como algunos de los temas principales de la novela. El tono del libro es también interesante ya que Holden domina la narración de la historia. Mientras que el tono de Holden es sarcástico y burlesco, el tono de la novela parece un poco melancólico; podemos apreciar la soledad y el dolor del protagonista.

En el capitulo 2, Salinger continua desarrollando la historia de Holden Caulfield. No es la historia completa de su vida, pero esta historia más reciente es quizás la mas informativa de su vida hasta ahora. Salinger gradualmente indica que Caulfield tiene una historia mas larga y mas problemática que aquella de un típico adolescente rebelde. Holden se cambia de escuela a escuela sin ningún propósito. Hasta el estilo de narración de Holden indica su falta de coherente visión. Holden admite que no puede concentrarse en ningún tema en particular, y se pone a pensar en patinar sobre el hielo mientras el señor Spencer lo sermonea.

Como ya fue establecido en el capítulo anterior, Holden ejemplifica al típico sentimiento de alienación experimentado por cualquier adolescente. Holden rechaza la idea de que la vida es un juego, y está convencido de que él es un chico malentendido ( a pesar de ser un adolescente lo suficientemente privilegiado para cambiarse de escuelas privadas fácilmente), y justifica su inmadurez argumentando que está pasando por una fase. Sus críticas no tienen sustancia, como su insistencia en que los demás son unos hipócritas y su odio de algunas frases como “ buena suerte.” Quizás tenga razón al querer decir que la relaciones sociales y el lenguaje a veces suelen ser inauténticos, pero su nivel de alienación lo ha llevado al extremo de no permitirle encajar en ninguna sociedad humana. Holden parece no seguir su propio consejo al no ser autentico cuando halaga al señor Spencer y está de acuerdo con él.

Holden demuestra una gran aversión por todo lo que tiene que ver con los adultos, como el olor de la casa del señor Spencer y el comportamiento del señor Haas, y al mismo tiempo Holden mismo ocupa un espacio entre la niñez y el mundo adulto. La apariencia de Holden es como la de un adulto, con su alta estatura y sus canas, pero su comportamiento es aún muy inmaduro.

El comportamiento de Holden no es como el comportamiento típico y excusable de un adolescente, y el señor Spencer destruye esta idea de autenticidad al rechazar las justificaciones de Holden por su comportamiento y ayudándole a ver sus errores. El deseo de Holden por ser autentico parece simple solipsismo, una crítica a la que Holden no puede responder. Pero puede ser que Holden esté llevando una buena idea a un extremo. Holden resiste la idea de que para tener la vida que él quisiera, él tiene que satisfacer las ideas de otros sobre lo que es bueno. Si hacemos lo que otros quieren en vez de lo que nosotros queremos quizás sea un tipo de hipocresía, pero tal vez sea humildad, servicio, o el simple hecho de aprender de los demás.