Otelo Elementos Literarios

Tragedia.

Inglés.

Venecia y Chipre, inicios del siglo XVII.

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Al ser un drama con una sola trama principal, Otelo se caracteriza por tener un tono predominantemente trágico. Solo tiene un momento de alivio cómico cuando hace aparición un bufón, que tiene apenas algunas líneas breves de diálogo.

El protagonista de la tragedia es Otelo, y quien produce su desgracia es su alférez, Yago.

El conflicto principal del drama es el supuesto amorío entre Desdémona y Casio, que desata la ira de Otelo. Por detrás de esta aparente traición, subyace el engaño de Yago, motivo principal del drama.

El punto climático de la obra sucede en la última escena del Acto III, cuando Yago consigue, mediante insinuaciones, que Otelo comience a dudar de la fidelidad de Desdémona. Este momento es clave para entender cómo Otelo es arrastrado por su orgullo, sus celos y sus inseguridades hacia el desenlace de su destino trágico.

Varios momentos de la obra anticipan su final trágico. Quizás el más importante sucede cuando Brabancio advierte a Otelo que Desdémona es capaz de engañarlo. Aunque Otelo no duda en ese momento del amor de Desdémona, esta es la primera señal, por más injustificada que sea, que lo pone en alerta.

Yago utiliza frecuentemente la atenuación en su plan de venganza. Por ejemplo, le sugiere a Casio que Desdémona es promiscua cuando le dice que es "afecta al juego", o intenta engañar a Otelo jugando con el doble sentido de la palabra inglesa "lie" (en español: "mentir" y "acostarse"). Otelo también utiliza la atenuación para incriminar a Desdémona, como cuando le dice que tiene la mano "cálida y húmeda", haciendo alusión a su supuesta naturaleza lasciva.

Aparecen en la obra algunas alusiones a conocimientos propios de la época, como el arriba mencionado de la mano cálida y húmeda, o cuando Otelo compara el recuerdo del pañuelo con un cuervo que visita una casa en desgracia, haciendo referencia a que el cuervo era considerado un signo de mal augurio.

Ver sección "Imágenes".

Resulta paradójico que Otelo acuse a Desdémona de haberle sido infiel, cuando Desdémona es el personaje más honesto y bondadoso de toda la obra. En un sentido inverso, es una paradoja y una ironía que Yago, siendo tan manipulador, sea nombrado varias veces con el adjetivo de "honesto".

Se puede establecer un paralelismo entre algunos personajes de Otelo y otras obras de Shakespeare. Yago es parecido a Ricardo III, de la obra homónima, en el hecho de que es falso y de que es consciente de ser un villano. El personaje de Desdémona es paralelo al de Ofelia en 'Hamlet', porque ambos son personajes inocentes y bondadosos. Por otra parte, se puede ver un paralelismo entre el destino trágico de Emilia y el de Desdémona, porque ambas mueren a manos de sus maridos.

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'Otelo' se caracteriza por utilizar con frecuencia la ironía dramática, puesto que el público sabe más que la mayoría de los personajes, dado que Yago tiene muchos soliloquios en los que se dirige a la audiencia y le cuenta sus planes. El personaje de Yago es muy importante para que los espectadores entiendan la trama, y dado que sus motivaciones personales no son muy claras, se lo puede interpretar a él mismo como un recurso dramático, el más importante para el desarrollo de la historia.