Otelo

Resumen de la obra

Otelo y Desdémona por Muñoz Degrain, pintura de 1881.

Acto I

Yago se encuentra hablando con Rodrigo, quien confiesa que está enamorado de Desdémona y le reprocha a aquel que sus consejos han sido inútiles para acercarse a su amada. Yago, a su vez, está furioso con Otelo, porque no le ha nombrado su lugarteniente a él, sino a Casio. Rodrigo avisa a Brabancio, padre de Desdémona, que esta se ha escapado con Otelo. En otro lugar, poco después, Yago cuenta a Otelo que ha estado varias veces a punto de matar a Brabancio porque este hablaba mal de él. Llega Casio para llamar a Otelo ante el Senado veneciano para que reciba el mando de una expedición a Chipre contra los turcos. Estando allí, Brabancio le acusa de seducir engañosamente a su hija, pero Otelo cuenta toda su historia y hace llamar a Desdémona para que declare si no le sigue por su voluntad. Después, Yago incita a Rodrigo a reunir dinero y a seguir a Otelo para conseguir a Desdémona cuando esta se canse de su "moro", lo que, según afirma él, es prohibido .

Acto II

En Chipre, una tormenta ha destruido la flota turca antes de que los venecianos combatieran contra ella. Casio ha desembarcado ya; aparece la nave de Otelo, tan esperada por Desdémona, Yago, Rodrigo y la mujer de Yago (Emilia), llegados antes en otra nave. Entre todos ellos se forma una conversación un tanto desvergonzada en sus alusiones nupciales. Aparece Otelo y se va con Desdémona. Yago convence a Rodrigo de que Desdémona, en realidad, está enamorada de Casio, y le incita a provocar a este para que le quiten su puesto de teniente de Otelo. Chipre está en fiestas: Yago quiere hacer beber a Casio, quien se marcha, pero vuelve con otros (entre ellos, Montano) que ya han conseguido que beba, y se va otra vez. Yago manda a Rodrigo provocar a Casio, que vuelve persiguiendo a Rodrigo. Casio, en lucha, hiere a Montano, que le quería retener. Aparece Otelo, para saber qué riñas son esas. Las hipócritas declaraciones de Yago contribuyen a que despida a Casio de su puesto de lugarteniente suyo. Quedan solos Yago y Casio; Yago le convence para que apele a Desdémona, y luego (ya solo) decide que Emilia también ayude a Casio en esa tarea.

Acto III

Yago va a buscar a Emilia para que Casio hable con ella sobre cómo ver a Desdémona. Casio se entrevista con Desdémona, suplicándole que interceda ante Otelo para recuperar su puesto de lugarteniente. Se está despidiendo cuando llega Otelo y le ve irse. Desdémona intercede por Casio ante Otelo, pero este aplaza el asunto. Yago suscita celos en Otelo, a propósito de esa visita de Casio. Vuelve Desdémona, y encuentra perplejo a Otelo. Se le cae el pañuelo que le había regalado Otelo, con quien se va. Emilia recoge el pañuelo y se lo entrega a Yago, ya que este se lo había pedido reiteradamente y Yago lo deja caer luego en el cuarto de Casio. Vuelve Otelo, ya del todo celoso. Yago le dice que, aunque no pueda ahora probar sus celos, están bien fundados, y le promete pruebas. Desdémona, con Emilia, va a buscar a Casio. Aparece Otelo: Desdémona le dice que ha mandado llamar a Casio para que hable con él. Otelo le pide el pañuelo que, según Yago, habría regalado ella a Casio. Como Desdémona no lo tiene, se va, furioso. Entran Yago y Casio; este habla con Desdémona sobre la inutilidad de sus intentos de mediación. Casio, que tiene el pañuelo de Desdémona (sin saber que es de ella, por haberlo encontrado en su cuarto, dejado allí por Yago), se lo da a una mujer con quien tiene amores, Blanca.

Acto IV

Yago, con insinuaciones, aumenta los celos de Otelo, quien sufre un ataque. Yago hace observar su conversación con Casio, llevada por él malignamente.Otelo queda convencido al ver el pañuelo: Yago impide que se incline a la compasión y al perdón, y le incita a estrangular a Desdémona. Entra Ludovico, de Venecia, primo de Desdémona, con una carta en que ordenan a Otelo volver a Venecia, dejando a Casio al mando de la flota. Otelo abofetea a Desdémona, ya entregado a sus celos, y le dice que se retire. Ludovico piensa que se ha vuelto loco. Otelo habla de sus celos con Emilia, quien niega toda culpa por parte de Desdémona. Entra esta, y también rechaza toda sospecha de Otelo. Él se va, y Yago le dice a Emilia que la excitación de Otelo está causada por sus responsabilidades de mando. Se queda solo Yago, y entra Rodrigo, quien le reclama que cumpla su promesa de conseguirle ver a Desdémona, a cambio de lo cual le había dado joyas y dinero.

Acto V

Yago acompaña a Rodrigo, situándole al acecho para que mate a Casio, pero este hiere a Rodrigo, aunque es herido por la espalda por Yago. Entra Otelo y alaba a Yago, creyendo que ha herido a Casio en atención a él mismo y a sus celos. Quedan gimiendo Casio y Rodrigo. Aparece Ludovico, con Graciano, pero no se atreve a acercarse’. Entra Yago, en camisa, como si se hubiera acostado. Casio le dice que Rodrigo le ha herido, sin saber que es el mismo Yago quien lo ha hecho. Yago remata a Rodrigo para que no descubra su intriga. Llega Blanca, y se llevan herido a Casio, quien declara no conocer al hombre ya muerto (Rodrigo). Yago hace que le retiren. Llega Emilia, ante la cual Yago echa la culpa de la pelea a Blanca. Otelo entra a la habitación de Desdémona y la ahorca. Emilia aclara la situación, y acusa a Yago por lo que hizo. Finalmente, Otelo se suicida tras darse cuenta de que asesinó a su esposa en vano porque todo había sido obra de Yago.


This content is from Wikipedia. GradeSaver is providing this content as a courtesy until we can offer a professionally written study guide by one of our staff editors. We do not consider this content professional or citable. Please use your discretion when relying on it.