Soneto CLXVI (“Mientras por competir con tu cabello”)

Soneto CLXVI (“Mientras por competir con tu cabello”) Temas

'Carpe diem'

Se trata del tema principal del soneto y es un tópico literario clásico, una locución latina cuyo significado es "aprovecha el día". Es decir, alude a la importancia de aprovechar el tiempo presente para disfrutar de los placeres que suponen la juventud. El origen de este concepto está en la obra del poeta latino Horacio (65-8 a. C.).

Durante la Edad Media, este tópico se utiliza para instar al aprovechamiento del presente porque la muerte acecha en el futuro. En el Renacimiento, el peligro pasa a ser la vejez, y el tópico, en realidad, funciona como una invitación optimista al disfrute sensual y vitalista. Durante el Barroco, se torna más pesimista y vuelve a advertir sobre la muerte.

En este poema, se utiliza el tópico para animar a la joven y bella interlocutora de la voz poética a que aproveche su presente antes de que el tiempo continúe su curso y provoque consecuencias. Se la exhorta para que goce de sus dones dado que, eventualmente, envejecerá y, de forma inevitable, morirá. En el Barroco, este tópico se torna oscuro y lúgubre: la consecuencia final es la muerte.

La juventud

Vinculada al tema anterior, la noción latina de collige virgo rosas es central en el soneto. Significa, literalmente, "coge, virgen, las rosas", y se utiliza para instar a los jóvenes a aprovechar el tiempo de la belleza de la juventud, antes de que, con el paso de los años, se marchiten como les sucede a las rosas. Se recuerda, así, que esa belleza y lozanía no son eternas, sino que se trata de un periodo en la vida de las personas.

En el poema, la voz poética admira y elogia la belleza de la amada a través de la enumeración de sus rasgos y de la comparación con objetos idealizados como bellos. La exhorta, entonces, a gozar de esa belleza y le recuerda que, en algún momento, la perderá: "No sólo en plata o vïola troncada / se vuelva" (vv. 12-13). Antes la compara con un bello lirio, pero aquí le señala que corre peligro de convertirse en una violeta marchita.

La belleza

Se trata de un tópico literario clásico asociado al procedimiento del descriptio puellae, una expresión latina que significa "descripción de la amada". Consiste en realizar una enumeración y descripción de las características físicas de la joven amada, y destacar sus rasgos idealizados, tales como el cabello rubio, la tez blanca, los labios rojos. Esta enumeración se hace de forma gradual y en orden descendente, es decir, desde arriba hacia abajo: el cabello, los ojos, la boca, el cuello.

Góngora utiliza este tópico para dar cuenta de la belleza hegemónica de la amada. Sin embargo, rompe con el orden clásico descendente, dado que, en su exhortación al goce ("goza cuello, cabello, labio y frente", v. 9), comienza por abajo, en el cuello. Luego sube al cabello, baja la vista hacia los labios y vuelve a ascenderla hacia la frente.

La intención del autor, al destacar pormenorizadamente la belleza idealizada de la mujer, es contrastar luego con lo que sucede tras el paso del tiempo, cuando la dama deja de ser atractiva y se convierte en tierra, en polvo y, luego, en nada.

La fugacidad de la vida

Este tema, de gran centralidad en el soneto, se condensa en la expresión latina de tempus fugit, un tópico literario que refiere a la fugacidad del tiempo, al modo en que pasa rápidamente. En ese transcurso, la lozanía de la amada pasa, ella envejece y sus cualidades físicas se deterioran. La "edad dorada", metáfora para referirse a la juventud, se termina. Y, tras ello, sucede la muerte.

Este tópico se vincula con otra locución latina, memento mori, que significa "recuerda que morirás". Se recuerdan, así, las limitaciones propias de la naturaleza humana. La única certeza es la de la muerte: "Se vuelva, más tú y ello juntamente / en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada" (vv. 13-14).

La muerte

Íntimamente asociado al tema de la fugacidad de la vida, este es otro de los tópicos literarios clásicos presentes en el poema. Se corresponde con la expresión latina pulvis et umbra sumus, cuyo significado literal es "polvo y sombra somos". Esta expresión hace referencia a la muerte y es utilizada, con anterioridad, por el poeta latino Horacio y en un epigrama de Ausonio sobre los héroes de Troya. Además, la asociación del polvo con la muerte aparece también en el Génesis bíblico con el objetivo de recordar a los mortales que el cuerpo humano no es eterno: "Polvo eres y en polvo te convertirás" (Génesis 3: 19).

En el poema, la muerte es un tema importante, dado que la voz poética sostiene que el tiempo transcurre y lleva, inexorablemente, a ese destino. El último verso, "en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada" (v. 14), da cuenta de una degradación. En eso se convertirá el cuerpo de la amada. Son términos de destrucción y oscuridad que se oponen a la vitalidad y luminosidad de los primeros versos del poema, en los que se destacan los rasgos que hacen bella a la mujer.