La vida del Buscón

Estilo

La sátira se exagera en esta obra hasta el punto de ser una caricatura sangrienta.

Quevedo no describe lugares y personajes de forma realista, sino grotesca, hasta obtener una visión esperpéntica. Esta exageración es un rasgo típicamente barroco. Todo es extremado: lleva la suciedad hasta lo más repugnante, la ironía al sarcasmo más brutal, el Dómine Cabra no es sólo pobre y miserable, es “archipobre y protomiseria”.

Trata a sus personajes con frialdad, sin compasión ni simpatía. Los describe con los trazos más negros, exagerando sus deformidades físicas y morales. Acaban siendo puras caricaturas.

Demuestra un alto dominio del lenguaje, no solo por lo ilimitado de su vocabulario, sino también por su habilidad para jugar con él, forzando dobles significados, retorciéndolo. Utiliza un brillante estilo conceptista, impropio del personaje que se supone que está narrando sus aventuras y desventuras en primera persona. En su obra abundan los chistes macabros, las groserías, los juegos de palabras y dobles sentidos.


This content is from Wikipedia. GradeSaver is providing this content as a courtesy until we can offer a professionally written study guide by one of our staff editors. We do not consider this content professional or citable. Please use your discretion when relying on it.