El mercader de Venecia

El Mercader de Venecia Vídeo

Subscribe to the GradeSaver YouTube channel:

Vea el resumen en video ilustrado del clásico El Mercader de Venecia de Shakespeare.

Transcripción del Video:

El Mercader de Venecia, de William Shakespeare, comienza con Antonio, un mercader cristiano, quien se encuentra deprimido. Sus amigos intentan animarlo, sugiriendo que tal vez esté preocupado por el estado de sus barcos en el mar. Entretanto, el querido amigo de Antonio, Bassanio, un aristócrata que ha perdido todo su dinero, viene a pedirle a Antonio un préstamo monetario, para que él, Bassanio, pueda viajar a Belmont para cortejar a una rica heredera llamada Porcia.

Es evidente que Antonio y Bassanio mantienen una profunda y cariñosa amistad. Como Antonio no tiene los fondos para darle a Bassanio el dinero directamente, se ofrece a utilizar su nombre y su solvencia para conseguir un préstamo para su amigo. Bassanio encuentra a Shylock, un prestamista judío, y lo convence de que le preste tres mil ducados. En un giro bastante inusual, Shylock accede a no cobrarles intereses a los cristianos, pero en su lugar hace una extraña propuesta: si no puede devolver el dinero, Antonio le dará a Shylock una libra de su propia carne. Antonio acepta los términos del contrato, o "fianza".

Mientras tanto, en Belmont, Porcia está melancólica. Su padre, ya muerto, decretó que todos los pretendientes de Porcia, para obtener su mano, deben participar en una prueba. Los pretendientes reciben tres cofres: uno de oro, otro de plata y otro de plomo. Uno de ellos contiene un retrato de Porcia en su interior; el pretendiente que elija este cofre tendrá permiso para casarse con ella. Primero, el príncipe de Marruecos acude a cortejar a Porcia y escoge el cofre de oro; en su interior encuentra una calavera, que simboliza la forma en que el oro oculta la corrupción. El siguiente pretendiente, el Príncipe de Aragón, elige el cofre de plata, que lleva una inscripción que indica que "dará al hombre lo que merece". En su interior hay un retrato de un idiota.

De vuelta en Venecia, la hija de Shylock, Jessica, ha elaborado un plan para huir con un cristiano, Lorenzo. Planean escapar una noche en la que Shylock esté fuera. Shylock le ordena a Jessica que cierre bien la casa, ya que esa noche habrá mascaradas y música en la calle. Una vez que sale, Lorenzo llega con dos amigos, situándose debajo de la ventana del piso superior de Jessica. Ella aparece vestida de niño, les arroja un cofre con ducados y luego huye con ellos.

Cuando Shylock descubre que su hija se ha fugado con sus ducados, su devastación lo abruma. Mientras tanto, se rumorea que muchos de los barcos de Antonio se han hundido o se han perdido en el mar. Shylock empieza a deleitarse con la idea de que va a poder exigirle su libra de carne a Antonio, en venganza por los muchos insultos que aquel le ha infligido a lo largo de los años.

Entretanto, Bassanio ha llegado a Belmont con su amigo Graciano. Porcia recuerda a Bassanio como el elegante soldado del que se enamoró varios años atrás. Bassanio elige el cofre de plomo y encuentra la foto de Porcia dentro. Después de que Porcia le dé un anillo para sellar su compromiso, Graciano les informa que él y la doncella de Porcia, Nerissa, también desean casarse.

Bassanio recibe una carta de Antonio anunciando que no le puede pagar a Shylock y que debe renunciar a una libra de carne. Porcia le dice a Bassanio que tome seis mil ducados -el doble de la cantidad originalmente adeudada- y regrese a Venecia, donde podrá pagarle a Shylock y cancelar el contrato. Después de que Bassanio y Graciano se marchan, y sin que ellos lo sepan, Nerissa y Porcia parten hacia Venecia disfrazadas de hombres. Jessica y Lorenzo cuidarán de Belmont mientras ellas no están.

De vuelta en Venecia, en un tribunal de justicia, el duque que lo preside le suplica a Shylock que perdone el contrato y deje a Antonio en libertad. Pero Shylock se niega, incluso cuando Bassanio le ofrece el doble de lo adeudado. El tribunal espera entonces la llegada de un jurista. Nerissa entra en la corte y le entrega al duque una carta en la que dice que el doctor Bellario ha enviado a un instruido joven jurista en su lugar.

Porcia entra disfrazada como el joven doctor "Baltasar". Porcia intenta persuadir a Shylock de que le perdone la vida a Antonio apelando a la "piedad". Al ver que Shylock no cede, Porcia le concede su libra de carne. Shylock sostiene un cuchillo, listo para cortar el pecho de Antonio.

De pronto, Porcia lo detiene. Él puede obtener su libra de carne, dice, pero sin derramar una sola gota de sangre, y la carne debe pesar exactamente una libra, ni más ni menos, o Venecia podrá confiscarle sus tierras y bienes. Shylock, claramente incapaz de cumplir, se echa atrás y dice que aceptará el triple de la cantidad original que se le debe.

Pero Porcia se niega y sigue adelante. Al exigir la carne de Antonio, Shylock estaba dispuesto a quitarle la vida. Si un extranjero conspira contra la vida de un veneciano, la mitad de su riqueza ha de entregarse al hombre contra el que conspiró, la otra mitad la tomará el Estado, y el duque podrá condenar a muerte al conspirador. En ese punto, el duque perdona la vida de Shylock y Antonio le dice a la corte que perdonará la multa de la mitad de la riqueza de Shylock siempre que este se convierta al cristianismo. Además, el dinero que le corresponde a Antonio será heredado por Lorenzo y Jessica después de que Shylock muera. Shylock ha perdido absolutamente todo.

Después del juicio, Bassanio le ofrece al “doctor Baltasar” (Porcia disfrazada), por su buen trabajo, cualquier cosa que desee. Porcia le pide su anillo y Antonio convence a Bassanio de que se lo dé. Del mismo modo, Nerissa, vestida como secretario de Baltasar, le pide su anillo a Graciano y este se lo entrega.

Porcia y Nerissa regresan a Belmont vestidas como ellas mismas. Bassanio y Graciano llegan poco después. Porcia le pregunta a Bassanio por el anillo (aquel que él regaló). Cuando Porcia finalmente le revela el anillo a Bassanio, este se sorprende al ver que es el mismo que le dio a Baltasar. Porcia y Nerissa cuentan entonces la verdad sobre Baltasar y su secretario. La obra termina con las tres parejas felices yéndose a dormir: Lorenzo y Jessica, Nerissa y Graciano, y Porcia y Bassanio. Sin embargo, Antonio queda excluido de este círculo de amigos casados y, por supuesto, de regreso en Venecia, Shylock ha quedado arruinado por completo.